lunes, 20 de abril de 2009

¿Recuerdas...



















¿Recuerdas la alberca verde y serena
de terciopelo tacto y amor ciego,
allí donde tu cuerpo fue mi fuego
y no tenerte, mi amor, fue mi pena?

Miradas y sonrisas que se fueron
difuminando en aquella tarde eterna
anclándome por siempre en la condena,
el lugar donde triste me pusieron.

Mi torpe corazón en ti incidía
ajeno a la razón y a mi cabeza
luchando por tu amor sin cobardía.

Quererte ha sido siempre mi firmeza
mi sueño, mi ambición y mi osadía
y no tenerte ha sido mi tristeza.

5 comentarios:

  1. Que intensos son los amores que no se llegan a tener y cuanta huella dejan en nosotros. Precioso el poema. La última estrofa me parece hermosísima.

    Un abrazo

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  2. Verdial éste poema lo ha hecho un bloguero gaditano al que le he comprado los derechos y voy a proyectar para el futuro junto con la chica del puro.

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  3. Bueno, bueno, bueno, tendré que hacer un acta notarial pero para que conste mi agradecimiento. ¿Lo del puro es por mi? Un abrazo letrado. Por cierto, los que desentonan un poco son ellos. ¿No?

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  4. Y la chica sobre el puro???? es impresionismo???

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  5. Es que es un poeta de corazón, destila poesia por los poros.

    Besos.

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