jueves, 7 de agosto de 2014

Atardeceres




      El cuerpo blanco del atardecer
      Se desgarra y se vuelve escarlata,
      Tajeado y drenado y desecado
      Hasta volverse carmesí,
      Y cuelga irónicamente
      Con guirnaldas de niebla.

      Y el viento
      Soplando sobre Londres desde Flandes
      Tiene un gusto agrio.

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