lunes, 31 de marzo de 2014

El mar




EL MAR
De nuevo el mar, su gloria, su agonía,
su precipicio oscuro, su estertor pegajoso,
su cuerpo aquí, desnudo,
moviendo lentamente su equipaje de nubes.
De Pájaros sin playa, 1999

domingo, 30 de marzo de 2014

Flamenco:







Flamenco: 


De la tierra, 
esa música viene de la tierra, 
viene de la contienda, del asalto, del oscuro atropello 
de las arterias del planeta. 
Viene de la preponderancia del fuego, 
del confuso lenguaje de los yacimientos, 
del desconsuelo de los minerales, 
esa música es ciega como las raíces 
y es terca como las semillas. 
Sabe a tierra, como la boca de un cadáver, 
viene y es de la tierra, 
redobla a geología, 
esa música es parda como la corteza, 
compacta como los diamantes, 
no dictamina, sólo muestra 
la voraz certidumbre de lo vivo, 
el vértigo que va desde el sustrato 
a la calamidad que grita. 
Esa música narra el agujero 
que delata en los hombres su ascendencia, 
esa música es toda ese agujero; 
un sordo abismo que reclama 
la primera soledad, el primer llanto 
de la primera noche. 

(De: “La otra música.”) 

sábado, 29 de marzo de 2014

Tu Titiro a la sombra descansando



....
Tít.- Podrías esta noche aquí tendido
en blanda y verde hoja dar reposo
al cuerpo flaco, al ánimo afligido.
Y cenaremos bien, que estoy copioso
de maduras manzanas, de castañas
enjertas, y de queso muy sabroso.
Y ya las sombras caen de las montañas
más largas, y convidan al sosiego;
y ya de las aldeas y cabañas
despide por los techos humo el fuego.

viernes, 28 de marzo de 2014

Por mi se va a la ciudad doliente



'Por mi se va a la ciudad doliente,

por mi se ingresa en el dolor eterno,

por mi se va con la perdida gente'

jueves, 27 de marzo de 2014

Pido la paz y la palabra


Escribo
en defensa del reino
del hombre y su justicia. Pido
la paz
y la palabra. He dicho
«silencio»,
«sombra»,
«vacío»
etcétera.
Digo
«del hombre y su justicia»,
«océano pacífico»,
lo que me dejan.
Pido
la paz y la palabra.

miércoles, 26 de marzo de 2014

SI DIOS FUERA UNA MUJER



¿Y si Dios fuera una mujer?
Juan Gelman


¿y si dios fuera mujer?
pregunta juan sin inmutarse

vaya vaya si dios fuera mujer
es posible que agnósticos y ateos
no dijéramos no con la cabeza
y dijéramos sí con las entrañas

tal vez nos acercáramos a su divina
desnudez
para besar sus pies no de bronce
su pubis no de piedra
sus pechos no de mármol
sus labios no de yeso

si dios fuera mujer la abrazaríamos
para arrancarla de su lontananza
y no habría que jurar
hasta que la muerte nos separe
ya que sería inmortal por antonomasia
y en vez de transmitirnos sida o pánico
nos contagiaría su inmortalidad

si dios fuera mujer no se instalaría
lejana en el reino de los cielos
sino que nos aguardaría en el zaguán del
infierno
con sus brazos no cerrados
su rosa no de plástico
y su amor no de ángeles

ay dios mío dios mío
si hasta siempre y desde siempre
fueras una mujer
qué lindo escándalo sería
qué venturosa espléndida imposible
prodigiosa blasfemia

martes, 25 de marzo de 2014

Amor constante más alla de la muerte


Cerrar podrá mis ojos la postrera
sombra que me llevare el blanco día,
y podrá desatar esta alma mía
hora a su afán ansioso lisonjera:
mas no, de esotra parte, en la ribera,
dejará la memoria, en donde ardía:
nadar sabe mi llama la agua fría,
y perder el respeto a ley severa.
Alma a quien todo un dios prisión ha sido,
venas que humor a tanto fuego han dado,
medulas que han gloriosamente ardido,
su cuerpo dejará, no su cuidado;
serán ceniza, mas tendrá sentido;
polvo serán, mas polvo enamorado.

Francisco de Quevedo

lunes, 24 de marzo de 2014

Copla X



No soy dueño de mí mismo
ni voy donde a mí me agrada,
atado llevo el deseo
al hilo de tu mirada.

domingo, 23 de marzo de 2014

No he de callar,


No he de callar, por más que con el dedo,
ya tocando la boca, o ya la frente,
silencio avises o amenaces miedo.
¿No ha de haber un espíritu valiente?
¿Siempre se ha de sentir lo que se dice?
¿Nunca se ha de decir lo que se siente?
Hoy sin miedo que libre escandalice
puede hablar el ingenio, asegurado
de que mayor poder le atemorice…
En otros siglos pudo ser pecado
severo estudio y la verdad desnuda,
y romper el silencio el bien hablado.
Pues sepa quien lo niega y quien lo duda
que es la lengua la verdad de Dios severo
y la lengua de Dios nunca fue muda.
(Francisco de Quevedo)

sábado, 22 de marzo de 2014

El pajaro yo




(Pablo Insulidae Nigra)

ME llamo pájaro Pablo,
ave de una sola pluma,
volador de sombra clara
y de claridad confusa,
las alas no se me ven,
los oídos me retumban
cuando paso entre los árboles
o debajo de las tumbas
cual un funesto paraguas
o como una espada desnuda,
estirado como un arco
o redondo como una uva,
vuelo y vuelo sin saber,
herido en la noche oscura,
quiénes me van a esperar,
quiénes no quieren mi canto,
quiénes me quieren morir,
quiénes no saben que llego
y no vendran a vencerme,
a sangrarme, a retorcerme
o a besar mi traje roto
por el silbido del viento.
Por eso vuelvo y me voy,
vuelo y no vuelo pero canto:
soy el pájaro furioso
de la tempestad tranquila.

viernes, 21 de marzo de 2014

LECTORA DE PLACERES




LECTORA DE PLACERES

Te conocí en un burdel,
joya del universo,
en el cosmos no hay putas
solo orden y caos,
eres de las que se la juegan
como las estrellas y las lunas
bailan hasta estallar.
Conoces mi futuro
lectora de placeres,
como te conoce a ti
la dueña del estanco.
Vibra y
ama como aman las diosas
gana y
llévate mi trofeo,
que yo a ti
te amaré por siempre.

Managua, 17 de Febrero de 2014

jueves, 20 de marzo de 2014

GRANADA




Granada, calle de Elvira, 
donde viven las manolas, 
las que se van a la Alhambra, 
las tres y las cuatro solas. 
Una vestida de verde,
otra de malva, y la otra, 
un corselete escocés 
con cintas hasta la cola. 

Las que van delante, garzas 
la que va detrás, paloma, 
abren por las alamedas 
muselinas misteriosas.
¡Ay, qué oscura está la Alhambra! 
¿Adónde irán las manolas 
mientras sufren en la umbría
el surtidor y la rosa? 

¿Qué galanes las esperan? 
¿Bajo qué mirto reposan? 
¿Qué manos roban perfumes 
a sus dos flores redondas? 

Nadie va con ellas, nadie; 
dos garzas y una paloma. 
Pero en el mundo hay galanes 
que se tapan con las hojas. 
La catedral ha dejado 
bronces que la brisa toma; 
El Genil duerme a sus bueyes 
y el Dauro a sus mariposas. 

La noche viene cargada
con sus colinas de sombra; 
una enseña los zapatos 
entre volantes de blonda;
la mayor abre sus ojos 
y la menor los entorna. 

¿Quién serán aquellas tres 
de alto pecho y larga cola? 
¿Por qué agitan los pañuelos? 
¿Adónde irán a estas horas? 
Granada, calle de Elvira, 
donde viven las manolas,
las que se van a la Alhambra, 
las tres y las cuatro solas. 

miércoles, 19 de marzo de 2014

La puerta de la poesía



"La puerta de la poesía no tiene llave ni cerrojo: se defiende por su calidad de incandescencia. Sólo los inocentes, que tiene el hábito del fuego purificador, que tienen dedos ardientes, pueden abrir esa puerta y por ella penetran en la realidad.

La poesía pretende cumplir la tarea de que este mundo no sea sólo habitable para los imbéciles."

Aldo Pelligrini

martes, 18 de marzo de 2014

La amante




Soy la amante
que estrenas,
la nueva, la eterna,
la de muslos trigueños,
columnas seguras
que se abren perfectamente
para dar paso
a tu mar ancho y espeso.

Soy la de paralelas montañas,
erectas, duras,
por donde han caminado
pájaros heridos de amor.


Soy la amante nocturna,
la de noctámbulos besos,
( mis ojos, túneles profundos
donde se pierde la soledad).


Soy la de siempre, la eterna,
la que te arranca el hastío
de cada costado,
la que se tiende plácidamente,
la que se para,
la que te sorprende,
la que se quita las vestiduras
y se lava en tu río claro.

Soy la que te crucifica
con mis ojos, con mi lengua,
la que se pierde 
en tu mirada lela,
la que infatigable
recorre tu cuerpo,
la que vibra con devoción
en tu silencioso mundo.

Soy ella, la eterna,
la antigua, la nueva,
la de siempre
la que se cierra
la que se abre
la de ambivalentes tardes.

Soy la que renace,
la que se abre
la que se cierra.


Autora: Orieta Lozano


lunes, 17 de marzo de 2014

Memoria perdida




Hay un fondo borroso de papeles
quemados, como una repentina
combustión de residuos que se han ido
esparciendo en las habitaciones.

Casa sin nadie, ¿estuve alguna vez
aquí, cuando la inercia consistía
en un vago remedo de la felicidad,
y los incinerados
restos de la memoria se aventaban
por esos intramuros donde ya hasta la música
era una estratagema del silencio?

Se me ha olvidado todo lo que no dejé escrito

domingo, 16 de marzo de 2014

Soneto 2







Soneto 2
    
Cuando cuarenta inviernos diezmen el campo
caven grandes zanjas en la planicie,
Tu juvenil traje, migajones de ampo,
Flor será sin que nadie la acaricie.
cuando pregunten dónde está Belleza,
el tesoro de los vigorosos días,
Dirás que en ojos sumidos en vileza,
Consumidos por vergüenzas y agonías.
Cuánta alabanza mereciera Hermosura
Si respondieras "Este bello hijo mío
Mi tesoro administrará con hondura",
Belleza ardiendo siempre, y nunca sombrío.
Así fueras joven aunque seas viejo,
Y tu sangre tibia aunque lejos del fuego.


Sonnet 2

When forty winters shall besiege thy brow,
And dig deep trenches in thy beauty's field,
Thy youth's proud livery so gazed on now
Will be a tottered weed of small worth held:
Then being asked, where all thy beauty lies,
Where all the treasure of thy lusty days,
To say within thine own deep-sunken eyes
Were an all-eating shame, and thriftless praise.
How much more praise deserved thy beauty's use,
If thou couldst answer, "This fair child of mine
Shall sum my count, and make my oíd excuse,"
Proving his beauty by succession thine.
This were to be new made when thou art old,
And see thy blood warm when thou feel'st it cold.


sábado, 15 de marzo de 2014

A la merced del sábado



A la merced del sábado
Pegado a la merced del sábado
Sin angustias u otras consecuencias
Abierto a la hora inútil
Me apiado del sábado y su contigua
Conflagración dominical.
Muy resignado:
El anillo matrimonial y la decencia de orinar en casa propia.
La posibilidad de discernir
Y creer que todo va a ser definitivamente mejor.
Sólo la memoria es sobrehumana o real
Las uñas infamantes
A pesar de que, en ese día, estrictamente,
Se pueda –según norma- recomponer la salud
Y olvidar el trabajo abandonado:
Desestimar las armas las medallas
La idea de la soledad como un revólver
El horror de la cuchara ardiente
O a la acción justiciera del jefe en su mínima actitud.
Sábado de cataclismo demorado.
Establo donde la provisión se conforma y fondea,
En el corazón,

Como la bomba pura.

viernes, 14 de marzo de 2014

Plaza vieja








Plaza vieja

Mi kiosco, mi farol,
son los de esta plaza. Restaurante
económico con soportales y platos a diez pesetas,
el ruido de las motos, la cruz de la farmacia
y la camisa colgada en el balcón
como un ahorcado cabeza abajo.
Conozco un matrimonio
bien avenido, dueños del bar, gente gorda,
que se divierte bastante, bajo las sábanas,
honestamente, por la noche. Al despertar piensan
que el negocio prospera: ayer heladera nueva,
de las eléctricas. Y buenos clientes
las mañanas soleadas y las tardes lluviosas.
Entre la mujer, él y el padre se las arreglan;
todo queda en familia. Ciertamente,
exige sacrificios tener un bar y, sobre todo, las tapas
calientes, variadas, requieren mucho cuidado
y no descansar nunca. Pero que al menos el día
de fiesta a la semana no nos lo quiten:
en el barrio viejo todos están de acuerdo,
y yo también.
    Ya estamos en otoño.
No tiene sentido aquí hablar de hojas secas,
pues el único árbol es el farol, pero
yo voy cayendo poco a poco dentro
de mí mismo, del otro que hay debajo,
muy lejos, detrás de muchas capas
de tiempo; lo veo como por un árbol,
se dirige desde el sueño
hasta la fría mancha
morada del alba,
donde, legañoso, el día se restrega los ojos.

jueves, 13 de marzo de 2014

Pobre flor





POBRE FLOR
¿Por qué te miro así tan abatida,
pobre flor?
¿En dónde están las galas de tu vida
y el color?

Dime, ¿por qué tan triste te consumes,
dulce bien?"
¿Quién?, ¡el delirio devorante y loco
de un amor,
que me fue consumiendo poco a poco
de dolor!
Porque amando con toda la ternura
de la fe,
a mí no quiso amarme la criatura
que yo amé.

Y por eso sin galas me marchito
triste aquí,
siempre llorando en mi dolor maldito,
¡Siempre así!"-
¡Habló la flor!...
Yo gemí... era igual a la memoria
de mi amor.

miércoles, 12 de marzo de 2014

Dos angeles




No tengo sólo un Ángel 
con ala estremecida: 
me mecen como al mar 
mecen las dos orillas 
el Ángel que da el gozo 
y el que da la agonía, 
el de alas tremolantes 
y el de las alas fijas. 

Yo sé, cuando amanece, 
cuál va a regirme el día, 
si el de color de llama 
o el color de ceniza, 
y me les doy como alga 
a la ola, contrita. 

Sólo una vez volaron 
con las alas unidas: 
el día del amor, 
el de la Epifanía. 

¡Se juntaron en una 
sus alas enemigas 
y anudaron el nudo 
de la muerte y la vida!

martes, 11 de marzo de 2014

Servidumbre de paso




Servidumbre de paso

En nuestra sumisión nos consumamos,
en nuestra servidumbre nos crecemos,
vivimos a compás, 
en la angostura de un andar errátil
que nos da la amplitud,
                                       al comprender
la bella anomalía de este viaje.
Nómadas en esencia,
muchedumbre
que cruza en extravío
del uno al otro lado de nosotros,
polizones
en la nave del mundo,
huéspedes
al amparo de nadie,
en deuda con la vida, que está en deuda
con el secreto amor que profesamos
a todo trance siempre hacia la vida.
Apátridas por fuerza en nuestro espíritu.
A la buena de un dios en descalabro,
clandestino de mí,
pobre de qué.
señor de dónde,
en un inacabable deambular,
al arte por el arte
de estar vivo.
Un vaso de agua fresca al transeúnte,
un pedazo de pan al vagabundo,
un puñado de sal al peregrino,
que voy en trashumancia,
que voy de merodeo
,
voy de paso.

lunes, 10 de marzo de 2014

Autobiografía




Una casa vacía, otra derrumbada,
un niño muerto al que le cuentan cuentos,
despedidos fantasmas que se desvanecen,
ceniza y hueso, piedras derrotadas.
Cuartos alquilados, repetidos espacios fugaces,
las huellas de los cuerpos en las sábanas,
una pesada resaca sin destino,
voces que nadie escucha, imágenes de sueños.
Innecesarias páginas, gaviotas en la ventana,
mar o desierto, blancos despojos,
signos y rostros en la pared de la memoria.
Sucias pupilas de sol en México, tercos
los ojos redondos de la calavera
contemplan pasado, presente, futuro,
sombras tenaces, metáforas gastadas.
Miro sin ver lo que ya he visto,
humo disforme que se esfuma,
invisible mortaja bajo nubes fugaces.
Humo en la noche y la nada instantánea.

domingo, 9 de marzo de 2014

Verde, las hojas de geranio





Verde, las hojas de geranio 
en la luz gris de la tormenta. 
tiemblan, tensión 
de nervadura verde oscuro. 
Te mirabas las manos, 
nervadura de venas; si los dedos 
fueran deliciosos, decías. 
Al caminar 
apoyaba mi sien contra la tuya 
y en la noche escuchaba 
el ruiseñor y el graznido 
del pavo. Indiferencia 
de todo, oscuridad. 
Me llamabas con voz muy baja. 
Sólo un día reíste. 

(De ella, los pájaros)

sábado, 8 de marzo de 2014

ESTÁ LA PUERTA ABIERTA





Está la puerta abierta,
la vida está esperando
con su eterno presente,
con lluvia o bajo el sol.

Está la puerta abierta,
juntemos nuestros sueños
para vencer al miedo
que nos empobreció.

La vida es encontrarnos,
para eso nacemos,
porque el punto más alto
es llegar al amor.

Y no hay amor de uno,
sólo hay amor de todos,
y por ese motivo
estamos hoy aquí.

Está la puerta abierta,
la vida está esperando
con su eterno presente,
con lluvia o bajo el sol.

Está la puerta abierta,
juntemos nuestros sueños
para vencer al miedo
que nos empobreció.

Iremos de uno en uno,
después de pueblo en pueblo
hasta rodear al mundo
con la misma canción.

Todas las cosas bellas
comenzaron cantando,
no olvides que tu madre
cantando te acunó.

Todas las cosas bellas
comenzaron cantando,
no olvides que tu madre
cantando te acunó.

viernes, 7 de marzo de 2014

Elegía a la Marisela




Elegía a la Marisela
No ha muerto. Ha iniciado
Un viaje atardecido.
De azul en azul claro
—de cielo en cielo— ha ido
por la senda del sueño
con su arcángel de lino.
A las tres de la tarde
Hallará a San Isidro
Con sus dos bueyes mansos
Arando en cielo límpido
Para sembrar luceros
Y estrellas en racimos.
—Señor, ¿cuál es la senda
para ir al Paraíso?
—Sube por la Vía Láctea,
ruta de leche y lirio,
la menor de las Osas
te enseñará el camino.
Cuando sean las cuatro
La Virgen con el Niño
Saldrán a ver los astros
Que en su infancia de siglos
Juegan la Rueda-Rueda
En un bosque de trinos.
Y a las seis de la tarde
El ángel de servicio
Saldrá a colgar la luna
De un clavo vespertino.
Será tarde. Si acaso
No te han guardado sitio
Dile a Gabriel Arcángel
Que te preste su nido
Que está en el más frondoso
Árbol del Paraíso.
Murió la Marisela.
Pero aún queda un lirio

jueves, 6 de marzo de 2014

EL LOCO




He vivido entre los arrabales, pareciendo
un mono, he vivido en la alcantarilla
transportando las heces,
he vivido dos años en el Pueblo de las Moscas
y aprendido a nutrirme de lo que suelto.

Fui una culebra deslizándose
por la ruina del hombre, gritando
aforismos en pie sobre los muertos,
atravesando mares de carne desconocida
con mis logaritmos.

Y sólo pude pensar que de niño me secuestraron para una alucinante batalla
y que  mis padres me sedujeron para
ejecutar el sacrilegio, entre ancianos y muertos.

He enseñado a moverse a las larvas
sobre los cuerpos, y a las mujeres a oír
cómo cantan los árboles al crepúsculo, y lloran.
Y los hombres manchaban mi cara con cieno, al hablar,
y decían con los ojos «fuera de la vida», o bien «no hay nada que pueda
ser menos todavía que tu alma», o bien «cómo te llamas»
y «qué oscuro es tu nombre».

He vivido los blancos de la vida,
sus equivocaciones, sus olvidos, su
torpeza incesante y recuerdo su
misterio brutal, y el tentáculo
suyo acariciarme el vientre y las nalgas y los pies
frenéticos de huida.

He vivido su tentación, y he vivido el pecado
del que nadie cabe nunca nos absuelva.