viernes, 2 de septiembre de 2011

Mañana al alba






Mañana al alba, cuando clarea la campaña,
partiré. Mira, sé que tú me esperas ahí.
Iré por el bosque, iré por la montaña.
No puedo permanecer ya más lejos de ti.



Caminaré con los ojos en mi mente clavados,
sin ver nada más allá, sin escuchar ruido,
solo, las manos juntas, ignoto y encorvado,
triste, y con el día en noche convertido.



No miraré ni el oro de la tarde que tumba,
ni las velas lejanas, con viento de babor.
Y cuando al fin arribe, pondré sobre tu tumba
un ramo de acebo verde, y de brezo en flor.


3 de septiembre de 1847


VICTOR HUGO



ORIGINAL:


Demain, dès l'aube

Demain, dès l'aube, à l'heure où blanchit la campagne,
Je partirai. Vois-tu, je sais que tu m'attends.
J'irai par la forêt, j'irai par la montagne.
Je ne puis demeurer loin de toi plus longtemps.

Je marcherai les yeux fixés sur mes pensées,
Sans rien voir au dehors, sans entendre aucun bruit,
Seul, inconnu, le dos courbé, les mains croisées,
Triste, et le jour pour moi sera comme la nuit.

Je ne regarderai ni l'or du soir qui tombe,
Ni les voiles au loin descendant vers Harfleur,
Et quand j'arriverai, je mettrai sur ta tombe
Un bouquet de houx vert et de bruyère en fleur.

jueves, 1 de septiembre de 2011

ARIA DE BRAVURA


Yo no quise la turbia
soledad de los versos,
sino la vida clara
sin reflejarla en ellos.
Conocer las desdichas
por los libros ajenos
en la plaza y el retiro
de mis días benévolos.
No pude. Aparecía
un pájaro siniestro
y yo le hacía frente
con las armas que tengo.
Las tardes, 1988.

miércoles, 31 de agosto de 2011

Vaporcito encantado





 En este blog no suelo hacer comentario alguno para respetar a los maestros, pero en la tarde de ayer, nna vía de agua, al chocar con unas piedras en la entrada del puerto, fue la causa del naufragio de uno de los símbolos poéticos de Andalucía.  Algo se nos va con este símbolo de la Bahía gaditana. D.E.P. junto a Quiñones, Alberti, Paco Alba y tantos otros que perdemos para siempre...



Vengo a verte pasar todos los días,


Vaporcito encantado siempre lejos…

Tus ojos son dos rubios capitanes;

Tu labio es un brevísimo pañuelo

Rojo que ondea en un adiós de sangre!



Vengo a verte pasar; hasta que un día,

Embriagada de tiempo y crueldad,

Vaporcito encantado siempre lejos,

La estrella de la tarde partirá!



Las jarcias; vientos que traicionan;

Vientos de mujer que pasó!

Tus fríos capitanes darán orden; y quien habrá

Partido seré yo…!



César Vallejo (peruano?), 1918





martes, 30 de agosto de 2011

La sangre al río



LA SANGRE AL RÍO




Llegó la sangre al río.
Todos los ríos eran una sangre,
Y por las carreteras
De soleado polvo
—O de luna olivácea—
Corría en río sangre ya fangosa
Y en las alcantarillas invisibles
El sangriento caudal era humillado
Por las heces de todos.
Entre las sangres todos siempre juntos,
Juntos formaban una red de miedo.
También demacra el miedo al que asesina,
Y el aterrado rostro palidece,
Frente a la cal de la pared postrera,
Como el semblante de quien es tan puro
Que mata.
Encrespándose en viento el crimen sopla.
Lo sienten las espigas de los trigos,
Lo barruntan los pájaros,
No deja respirar al transeúnte
Ni al todavía oculto,
No hay pecho que no ahogue:
Blanco posible de posible bala.
Innúmeros, los muertos,
Crujen triunfantes odios
De los aún, aún supervivientes.
A través de las llamas
Se ven fulgir quimeras,
Y hacia un mortal vacío
Clamando van dolores tras dolores.
Convencidos, solemnes si son jueces
Según terror con cara de justicia,
En baraúnda de misión y crimen
Se arrojan muchos a la gran hoguera
Que aviva con tal saña el mismo viento,
Y arde por fin el viento bajo un humo
Sin sentido quizá para las nubes.
¿Sin sentido? Jamás.

No es absurdo jamás horror tan grave.
Por entre los vaivenes de sucesos

—Abnegados, sublimes, tenebrosos,
Feroces—
La crisis vocifera su palabra
De mentira o verdad,
Y su ruta va abriéndose la Historia,
Allí mayor, hacia el futuro ignoto,
Que aguardan la esperanza, la conciencia
De tantas, tantas vidas.

JORGE GUILLEN

lunes, 29 de agosto de 2011

El regionalismo de Machado





De aquellos que dicen ser gallegos, catalanes, vascos, extremeños, castellanos, etc., antes que españoles, desconfiad siempre. Suelen ser españoles incompletos, insuficientes de quienes nada grande puede esperarse.


- Según eso, amigo Mairena - habla Tortólez en un café de Sevilla-, un andaluz andalucista será también un español de segunda clase.

- En efecto - respondía Mairena -: un español de segunda y un andaluz de tercera.

Antonio Machado

sábado, 27 de agosto de 2011

CANCIÓN DE LA MADRE DEL AMARGO



CANCIÓN DE LA MADRE DEL AMARGO

Lo llevan puesto en mi sábana,
mis adelfas y mi palma.
Día veintisiete de agosto
con un cuchillito de oro.
La cruz. ¡Y vamos andando!
Era moreno y amargo.
Vecinas, dadme una jarra
de azófar con limonada.
La cruz. No llorad ninguna.
El Amargo está en la luna.

jueves, 25 de agosto de 2011

VERANO



Verano, ya me voy. Y me dan pena
las manitas sumisas de tus tardes.
Llegas devotamente; llegas viejo;
y ya no encontrarás en mi alma a nadie.
Verano! y pasarás por mis balcones
con gran rosario de amatistas y oros,
como un obispo triste que llegara de lejos a buscar y bendecir
los rotos aros de unos muertos novios.
Verano, ya me voy. Allá, en setiembre
tengo una rosa que te encargo mucho;
la regarás de agua bendita todos
los días de pecado y de sepulcro.
Si a fuerza de llorar el mausoleo,
con luz de fe su mármol aletea,
levanta en alto tu responso, y pide
a Dios que siga para siempre muerta.
Todo ha de ser ya tarde;
y tú no encontrarás en mi alma a nadie.
Ya no llores, Verano! En aquel surco
muere una rosa que renace mucho.

miércoles, 10 de agosto de 2011

Cantiga nova que se chama ribeira.




No niño novo do vento
hai unha pomba dourada,
meu amigo!
Quén poidera namorala!
 
Canta ao luar e ao mencer
en frauta de verde olivo.
Quén poidera namorala,
meu amigo!
 
Ten aires de frol recente,
cousas de recén casada,
meu amigo!
Quén poidera namorala!
 
Tamén ten sombra de sombra
e andar primeiro de río.
Quén poidera namorala,
meu amigo! 

Alvaro Cunqueiro

domingo, 31 de julio de 2011

Poema 4 de Veinte poemas de amor y ....




Es la mañana llena de tempestad
en el corazón del verano.

Como pañuelos blancos de adiós viajan las nubes,
el viento las sacude con sus viajeras manos.

Innumerable corazón del viento
latiendo sobre nuestro silencio enamorado.

Zumbando entre los árboles, orquestal y divino,
como una lengua llena de guerras y de cantos.

Viento que lleva en rápido robo la hojarasca
y desvía las flechas latientes de los pájaros.

Viento que la derriba en ola sin espuma
y sustancia sin peso, y fuegos inclinado.

Se rompe y se sumerge su volumen de besos
combatido en la puerta del viento del verano.

viernes, 29 de julio de 2011

A casa




A casa

Era uma casa
Muito engraçada
Não tinha teto
Não tinha nada
Ninguém podia
Entrar nela não
Porque na casa
Não tinha chão
Ninguém podia
Dormir na rede
Porque a casa
Não tinha parede
Ninguém podia
Fazer pipi
Porque penico
Não tinha ali
Mas era feita
Com muito esmero
Na Rua dos Bobos
Número Zero.

jueves, 28 de julio de 2011

Un hemisferio en una cabellera



Déjame respirar mucho tiempo, mucho tiempo, el olor de tus cabellos; sumergir en ellos el rostro, como hombre sediento en agua de manantial, y agitarlos con mi mano, como pañuelo odorífero, para sacudir recuerdos al aire.    

¡Si pudieras saber todo lo que veo! ¡Todo lo que siento! ¡Todo lo que oigo en tus cabellos! Mi alma viaja en el perfume como el alma de los demás hombres en la música.    

Tus cabellos contienen todo un ensueño, lleno de velámenes y de mástiles; contienen vastos mares, cuyos monzones me llevan a climas de encanto, en que el espacio es más azul y más profundo, en que la atmósfera está perfumada por los frutos, por las hojas y por la piel humana.    

En el océano de tu cabellera entreveo un puerto en que pululan cantares melancólicos, hombres vigorosos de toda nación y navíos de toda forma, que recortan sus arquitecturas finas y complicadas en un cielo inmenso en que se repantiga el eterno calor.    

En las caricias de tu cabellera vuelvo a encontrar las languideces de las largas horas pasadas en un diván, en la cámara de un hermoso navío, mecidas por el balanceo imperceptible del puerto, entre macetas y jarros refrescantes.    

En el ardiente hogar de tu cabellera respiro el olor del tabaco mezclado con opio y azúcar; en la noche de tu cabellera veo resplandecer lo infinito del azul tropical; en las orillas vellosas de tu cabellera me emborracho con los olores combinados del algodón, del almizcle y del aceite de coco.    

Déjame morder mucho tiempo tus trenzas, pesadas y negras. Cuando mordisqueo tus cabellos elásticos y rebeldes, me parece que como recuerdos.

lunes, 13 de junio de 2011

Biografía imaginaria



 
Primero una infancia sin lindes y sin
renuncia ni meta. Oh delicia inconsciente.
De pronto miedo, barreras, escuela, vasallaje
y caída en la tentación y la pérdida.

Terquedad. El doblegado se torna doblegador
y venga en otros su propia derrota.
Amado, temido, salvador, batallador, vencedor
y dominador, sin pausa ni descanso.

Y luego a solas en lo lejano, liviano, frío.
Pero en el fondo de la figura erguida
tomar aliento en busca del Primero, Antiguo...

Y en eso saltó Dios de su escondite.

miércoles, 8 de junio de 2011

Ayer tarde al lago fuí


José Luis Jiménez Sánchez-Malo

















Ayer tarde al lago fuí
con la intención de conocer
algo nuevo.


Nos reunimos allí
y todo comenzó a surgir
como un sueño.


Creo recordar que por la noche
el pájaro blanco echó a volar
en nuestros corazones
en busca de una estrella fugaz.


Vivimos junto el amanecer
y el lago reflejó nuestros sueños.

Y en silencio fuimos a caer
junto al gran monte aquel
que nos vió el maor.


No puedo negar que me hizo daño,
que mi corazón huyó de tí.


Has de ser como la mañana
el día que te conocí.


Creo recordar que por la noche
el pájaro blanco echó a volar
en nuestros corazones
y en busca de una estrella fugaz.



Ayer tarde en el lago fuí...

 

miércoles, 18 de mayo de 2011

Mujer de Gabriel Celaya



Esas nubes amadas se hacen al fin estatua.

Si acaricio, doy forma
y, en el azul, desnuda como una diosa antigua,
estás tú, sólo bella.

Mas si viene la noche,
si una brisa te envuelve dulcemente asfixiante,
vuelves al mar confuso donde tomaste origen,
ola fresca y sonora que rompe alegremente,
toda alzada, y luego
ancha y derramada
como una madre llega ya al fin de las palabras,
sonríe piadosa.

martes, 17 de mayo de 2011

Bella de Neruda



Bella,
como en la piedra fresca
del manantial, el agua
...abre un ancho relámpago de espuma,
así es la sonrisa en tu rostro,
bella.

Bella,
de finas manos y delgados pies
como un caballito de plata,
andando, flor del mundo,
así te veo,
bella.

Bella,
con un nido de cobre enmarañado
en tu cabeza, un nido
color de miel sombría
donde mi corazón arde y reposa,
bella.

Bella,
no te caben los ojos en la cara,
no te caben los ojos en la tierra.
Hay países, hay ríos
en tus ojos,
mi patria está en tus ojos,
yo camino por ellos,
ellos dan luz al mundo
por donde yo camino,
bella.
Bella,
tus senos son como dos panes hechos
de tierra cereal y luna de oro,
bella.

Bella,
tu cintura
la hizo mi brazo como un río cuando
pasó mil años por tu dulce cuerpo,
bella.

Bella,
no hay nada como tus caderas,
tal vez la tierra tiene
en algún sitio oculto
la curva y el aroma de tu cuerpo,
tal vez en algún sitio,
bella.

Bella, mi bella,
tu voz, tu piel, tus uñas
bella, mi bella,
tu ser, tu luz, tu sombra,
bella,
todo eso es mío, bella,
todo eso es mío, mía,
cuando andas o reposas,
cuando cantas o duermes,
cuando sufres o sueñas,
siempre,
cuando estás cerca o lejos,
siempre,
eres mía, mi bella,
siempre.

miércoles, 11 de mayo de 2011

Pájaro herido

Retomo el blog después de un largo paréntesis. No será todos los días ni por las mañanas pero se hará lo que se pueda. Todo sea por ser un poco mejor. La poesía y la pintura son armas de persuasión masivas. 


Rodrigo Gross





Pájaro herido
Vuelo inútil : la luna ya ha perdido tu espíritu
y tu canto ya tiene por estela el silencio.
Pronto, estrella llovida, recipiente de nada,
nublarás unas flores o el brillo de una piedra.

Ni un rumor, ni una lágrima multiplican tu muerte,
ni un suspiro da eco tristemente a tu pico:
nadie siente que pierdas tu lugar en el aire
y que, al igual que duermen peces entre las olas
y hombres entre la tierra, no tengas tu descanso
en los azules vientos que acarician tus alas.

Y las nubes ya saben que es tu último,
y que, pronto tu boca la canción de tu vida
cantará silenciosa: pero guardan su llanto,
pero guardan su llanto para los olivares.


sábado, 30 de abril de 2011

FERIA DE ABRIL EN JEREZ



Y es que Andalucía
es una señora de tanta hidalguía
que apenas le importa "lo materiá".

Ella es la inventora de esta fantasía
de comprar y vender y mercar
entre risas, fiestas, coplas y alegría
juntando a la par
negocio y poesía...
La feria es un modo de disimular.

Un modo elegante
de comprar y vender.
Se lo oí decir a un tratante:
—Hay que ser inglés
pa hacer un negocio

poniéndole a un socio
un parte con veinte palabras medías,
que cada palabra cuesta un dinerá.
"Compro vagón muelle cinco tonelás.
Stop. Urge envío..." ¡Qué cursilería!
......................En Andalucía
con veinte palabras no hay ni pa empezá...
¡Que al trato hay que darle su poco de sá!...

Lo de menos, quizás, es la venta.
Lo de más, es la gracia, el aqué,
y el hacer que no vuelvo y volvé,
y el darle al negocio su sal y pimienta
......................como debe sé.
Negocio y poesía: ¡Feria de Jerez!
¡Rumbo y elegancia de esta raza vieja
que gasta diez duros en vino y almejas
vendiendo una cosa que no vale tres!

......................Jerez. El cielo bonito
......................se viste de oro y añil.
......................Lo mismo iba Joselito
......................aquella tarde de abril
......................en la Maestranza, en Sevilla.

......................—¿Te acuerdas? — ¡Qué maravilla
......................de tarde de primavera
......................llena de luz y de olor!
......................De allí se fue a Talavera
......................—¿te acuerdas?— y no volvió...

......................Pero volvamos al caso.
......................Móntate a la grupa mía.
......................No hay en toda Andalucía
......................caballo de mejor paso
......................ni de andar más señoril.
......................Vamos a echarle un vistazo,
......................niña, a la feria de abril.

¡Qué filosofía
la de aquellos mulos castaños! El lote,
bajo la modorra pesada del día,
parece hecho en barro. Por delante, al trote,
pasa un señorito, cruza un ganadero,
dos coches, un auto... Nada les asombra;
cada uno busca su pizca de sombra
bajo las orejas de su compañero.

Y se empieza el trato.
Pinta un garabato
la vara de "El Coli". Se apoya en el anca.
Saca su pañuelo —verde y raya blanca—,
lo dobla, lo guarda sacando la punta,
tose, escupe, pisa, se para y pregunta:
—¿Cuánto das por ella, Currito Duran?
—De los setecientos no paso un real:
es gacha y rendida sobre el menudillo.
—¿Tienes mal la vista? —La tengo cabal.
—¿No es buena la jaca? —Para un organillo.
—¿Lo dice la envidia?
—La formalidá.
—¿Estás ya pintón?
—Tengo hiperclorhidria.
—Pues ve a Lanjarón...

Y rueda un lejano sonar de cencerros
y un mugir de vacas y un ladrar de perros.
Rebuzna un borrico, grita un mayoral,
se ha escapado un mulo, corren tres gitanos.
La yegua alazana se ha puesto de manos,
y ha encallado un "Austin" en un barrizal.
Zumba un rebullicio, largo y palabrero.
—Mira, tito Jaime. — ¡Parece un inglés!
Y en un alazano pasa, caballero,
con chaqueta corta, don Pedro Domecq el Marqués.

Y hay el viejo negro, cenceño y enjuto,
que vende globitos:
y el que a dos reales retrato al minuto,
y el que ofrece flores y el que vende pitos,
y el gitano viejo que olímpicamente,
tratando sus burros, charla, llora y miente
con el gesto grave de un emperador:
ricitos de negra, mirada gatuna,
la cara verdosa como la aceituna
y los dientes blancos como el alcanfor.

Y luego el paseo: la hirviente
cascada de coches y gente
que orlan las barracas.
Gritos, altavoces, tambores, matracas:
—"Pasen, pasen, pasen. Vean la serpiente.
No hay peligro alguno. La entrada, un real."
"Pasen, pasen, pasen. Costumbres de Oriente,
vistas y figuras. No hay nada que atente
contra la moral."
—Y lan, lan-campanas; y tan, tan-tambores
y tarararira trompa y cornetín,
y un puesto de tortas, y un puesto de flores,
y uno de alfileres falsos en serrín;
y gente y más gente
que viene y que va
y una voz chillona que en los caballitos
comenta inocente:
— ¡Qué gusto que da! —;
y voces, y pitos:
"Pase el señorito,
pase el caballero.
Museo de Joselito,
con la muerte de Granero..."

Y un bullicio jaranero
que va y viene y corre y anda,
y el vals de "Luisa Fernanda"
tocado con un trombón
y el quejido largo de un acordeón
y una voz: "El ciego: tened compasión."
Y otra: "Una limosna para el pobre manco..."
Y los cencerritos que en el tiro al blanco
mueven unas tristes vacas de cartón.

Se luce el recluta junto a la niñera
y la mamá obesa vestida de raso
lleva dos de largo y una tobillera.
¡Y qué dialoguillos se cogen al paso!
—¿Y aquella barraca, qué es?
—¿Qué dice el letrero? —Petit Cabaret.
—¿Y el cartel qué pinta? —Pues, una mujer
en malla y camisa.

— ¡Qué desfachatez!
Juana, Paca, Elisa:
pasar más aprisa...
¡Esto no se ha visto jamás en Jerez!

Y así va la feria:
como en una noria,
una, cien, mil veces
pasa el cangilón.
Y así se va el día. La noche ha cerrado.
Llega el farolero, gruñón y cansado,
que viene apagando la iluminación.
Y queda un borracho, que, de lado a lado,
va gritando: " ¡Viva la revolución!"

Pasó el rebullicio, pasó la alegría...
Así son las cosas de esta Andalucía:
la forma brillante
y el fondo vacío;
para poco cante,
muy largo el jipío.

A menos negocio, mayor fantasía,
así son las cosas de esta Andalucía:
más sal que sustancia... ¡Feria de Jerez!
¡ Rumbo y elegancia de esta raza vieja
que gasta diez duros en vino y almejas
vendiendo una cosa que no vale tres!

viernes, 31 de diciembre de 2010

La ciudad



Tú decías: “Iré a otro país, iré a otra orilla,
encontraré otra ciudad mejor que ésta.

Cualquier cosa que intente hacer está destinada al fracaso
y mi corazón, como algo muerto, descansa enterrado.

¿Cuánto tiempo puedo dejar que mi mente se desmorone aquí?

Donde sea que me gire, donde sea que mire,
veo las negras ruinas de mi vida, aquí,
donde he pasado tantos años, perdidos, totalmente destruidos”.

No hallarás nuevo país, no hallarás otra orilla.
Esta ciudad siempre te perseguirá.
Caminarás las mismas calles,
envejecerás en los mismos barrios, encanecerás en las mismas casas.

Siempre acabarás en esta ciudad. No esperes nada de otro sitio:
no hay barco para ti, no hay camino.

Habiendo malgastado aquí tu vida, en este pequeño rincón,
la has destruido para cualquier lugar del mundo.

Kavafis