martes, 26 de marzo de 2013

Sobre las palabras



Sobre las palabras

No se puede salir con las palabras, siempre te comprometen.

Hay palabras que tratadas convenientemente acaban por adquirir el brillo único de esos cristales que son como luces abandonadas a la orilla del mar.

Algunas vienen envueltas en la niebla que entorna la melancolía. Se comenta de ellas que nacen en la soledad de los puertos al amanecer.

La palabra nace – afirma Herbert Conway – cuando en el silencio, en el primer silencio, un hombre imita a un papagayo.

El invento de la palabra pez supuso grandes dificultades. La palabra escama (surgió de inmediato) hizo aún más difícil la captura de aquélla. Alguien, tiempo después, dijo: Mereció la pena tanto esfuerzo. Sin embargo, una muchacha se sonrojó ante las imágenes sugeridas por aquella palabra.

Muy estricta en sus gustos, y gran conocedora del poder persuasivo de los sofismas, Gemma Steven declara sin mucho convencimiento: Primero es la palabra, después la rosa.

Nunca escribas estas palabras en una misma línea: tigre y paloma, pues es fácil que la primera devore a la segunda.

lunes, 25 de marzo de 2013

La semana adelantada





La semana adelantada
Un tío enfermo y en edad anciana
casó con su sobrina (¡muy mal hecho!),
doncella alegre, joven y lozana,
pronta a cobrar el marital derecho.

Díjola el novio: «Te prevengo, Juana,
ya que vas a estrenar el nupcial lecho,
que yo sólo una vez cada semana
podré servirte en algo de provecho.»

Conformose la ninfa; y recibiendo
en singular aquel tributo frío,
repetía entre sí: «Peor es nada.»

Mas llamado el anciano reverendo
le instaba humilde: «Vaya, tío mío,
siquiera una semana adelantada.»

domingo, 24 de marzo de 2013

ME DESTIERRO...


ME DESTIERRO...
Me destierro a la memoria,
voy a vivir del recuerdo.
Buscadme, si me os pierdo,
en el yermo de la historia,

que es enfermedad la vida
y muero viviendo enfermo.
Me voy, pues, me voy al yermo
donde la muerte me olvida.

Y os llevo conmigo, hermanos,
para poblar mi desierto.
Cuando me creáis más muerto
retemblaré en vuestras manos.

Aquí os dejo mi alma?libro,
hombre?mundo verdadero.
Cuando vibres todo entero,
soy yo, lector, que en ti vibro.

sábado, 23 de marzo de 2013

OTRA VEZ



OTRA VEZ
Siempre la primavera
y estas ganas de huir de las paredes.
Gira la rueda
ser otra vez virgen
para dejar otra vez de serlo
gira la rueda
mojarme en la tormenta
con un paraguas de risa
como una niña mala
gira que gira
la sangre savia verde
germina en mis caderas.

viernes, 22 de marzo de 2013

ROSA DE MELANCOLIA



ROSA DE MELANCOLIA
Era yo otro tiempo un pastor de estrellas,
y la vida, como luminoso canto.
Un símbolo eran las cosas más bellas
para mí: la rosa, la niña, el acanto.

Y era la armoniosa voz del mundo,
una onda azul que rompe en la playa de oro,
cantando el oculto poder de la luna
sobre los destinos del humano coro.

Me daba Epicuro sus ánforas llenas,
un fauno me daba su agreste alegría,
un pastor de Arcadia, miel de sus colmenas.

Pero hacia el ensueño navegando un día,
escuché lejano canto de sirenas
y enfermó mi alma de Melancolía.

jueves, 21 de marzo de 2013

El abrigo de Gógol



El abrigo de Gógol

Vago con el abrigo de Gógol y no me canso de leer los puentes. 
Oigo al gélido fantasma de Europa correr a zancadas por el 
hielo. Es la áspera libertad y su frío de rigor. Así miras sintiéndote 
responsable los árboles fustigados ayer, en los zapatos los pies 
cada vez más pesados. Así piensas sintiéndote responsable en 
la basura que es marca del otoño. En el fango que es la historia 
de las nubes. No temas al fantasma que reclama tu abrigo. Suele 
estar congelado. Y tú deberías pensar que la muerte es un general 
alemán que ahora deposita su ojo azul en la mesa y se marcha 
cojeando. Es la áspera libertad.

miércoles, 20 de marzo de 2013

Meditación en Lagunitas




Meditación en Lagunitas
El nuevo pensamiento es todo pérdida.
En eso se parece al antiguo pensamiento.
La idea, por ejemplo, de que cada particular borra
la luminosa claridad de una idea general.
Que el pájaro carpintero cara de payaso
que escudriña el esculpido tronco muerto
de aquel abedul es, por su sola presencia,
alguna trágica caída de un mundo primigenio
de luz indivisa. O la otra noción que dice
que, como en este mundo no hay una sola cosa
que corresponda al arbusto de la zarzamora,
una palabra es la elegía de lo que significa.
De esto hablamos anoche ya tarde y en la voz
de mi amigo había un delgado hilo de pena,
un tono casi de queja. Un rato después entendí
que, al hablar así, todo se disuelve:
justicia, pino, cabello, mujer, tú y yo.
Una vez hice el amor a una mujer y recuerdo cómo,
al tomar sus pequeños hombros entre mis manos,
sentí un violento asombro ante su presencia,
una sed de sal, sed del río de mi niñez
con sus cauces insulares, tonta música del barco
del placer, charco donde atrapamos aquel pececillo
naranja y plata llamado semilla de calabaza.
Apenas si tenía que ver con ella. Anhelo, decimos,
porque el deseo está lleno de distancias infinitas.
A ella yo le daba igual seguramente.
Pero cómo recuerdo la manera en que sus manos partían el pan,
lo que su padre le dijo para herirla, lo que soñaba.
Hay momentos en que el cuerpo es tan luminoso como las palabras,
días que son la carne buena prolongándose.
Una ternura tal, aquellas tardes y noches

repitiendo zarzamora, zarzamora, zarzamora



There are moments when the body is as numinous
as words, day that are the good flesh continuing.
Such tenderness, those afternoons and evenings,

saying blackberry, blackberry, blackberry.


martes, 19 de marzo de 2013

VELEIDAD




VELEIDAD
Me vienes y te vas,
tu rastro por mi cieno
mi rostro por tu altar.

Me vienes y te vas...

Mis límites más ciertos
invades y, al pasar,
hambre y dolor de tu verbo.

Y sin embargo te vas...

lunes, 18 de marzo de 2013

En el estudio del pintor




Para Ahmed el-Yahainy

Todas las tardes 
regreso a casa
tras dejar,en el taller,
mi rostro sobre el lienzo.
A la noche
me desprendo del marco de madera
y mis ojos escrutan las galerías de la sala:
los colores duermen en sus palestras,
los pinceles reposan en sus cuencos de aceite
y los cuadros dormitan.
Yo vigilo el lugar.
Mi cometido:
proteger las mortajas de los faraones
con las que el pintor
envolvió las momias de los antepasados,
de blanco;
protegerlas de los caprichos del azul, el verde y el marrón
para que lo blanco siga siendo blanco,
como la historia.
Y al alba,
vuelvo al bastidor
y cierro los ojos un instante
para echar una cabezada
antes de que el rostro impreso en la tela,
que es el mío,
se someta, una vez más, al pincel
de Ahmed el Yanayni.

domingo, 17 de marzo de 2013

Cebo




Cebo

La poesía nunca puede hablar de mí,
ni yo de la poesía.
Yo estoy solo, el poema está solo,
y el resto es de los gusanos.
Me detuve en las calles donde viven las palabras,
libros, cartas, informes,
y esperé.
Siempre supe esperar.
Las palabras, con sus formas claras u oscuras,
me volvieron más oscuro o más claro.
Los poemas me alcanzaron
y se reconocieron como objetos.
Yo pude verlo y verme.
No tiene fin esta adicción.
Escuadrones de poemas están buscando sus poetas.
Vagan sin mando por el amplio 
territorio de las palabras 
y aguardan el cebo de su perfecta,
hermética, condensada, acabada 
e irreductible 
forma.

sábado, 16 de marzo de 2013

Oracion





Señor,
Los que lo tienen todo no son felices.
Haz que no tengan nada
Para que sepan lo que es felicidad.

Medardo Fraile en Cuadernos del matemático

viernes, 15 de marzo de 2013

Un amor más allá del amor...




Un amor más allá del amor,
por encima del rito del vínculo,
más allá del juego siniestro 
de la soledad y de la compañía.
Un amor que no necesite regreso,
pero tampoco partida.
Un amor no sometido
a los fogonazos de ir y de volver,
de estar despiertos o dormidos,
de llamar o callar.
Un amor para estar juntos
o para no estarlo
pero también para todas las posiciones
intermedias.
Un amor como abrir los ojos.
Y quizá también como cerrarlos.

jueves, 14 de marzo de 2013

Alegraos





Alegraos con las flores que embriagan,
Las que están en nuestras manos.
Que sean puestos ya 
Los collares de flores.
Nuestras flores del tiempo de lluvia,
Fragantes flores,
Abren ya sus corolas.
Por allí anda el ave,
Parlotea y canta,
Viene a conocer la casa de dios.
Sólo con nuestros cantos
Perece vuestra tristeza.
Oh señores, con esto,
Vuestro disgusto se disipa.
Las inventa el Dador de la vida,
Las ha hecho descender
El inventor de sí mismo,
Flores placenteras,
Con ellas vuestro disgusto se disipa.

miércoles, 13 de marzo de 2013

El Arbolito




En el patio de mi casa
he sembrado un arbolito:
crece y crece tan bonito
que en tamaño ya me pasa!

Yo lo riego diariamente
con esmero y con amor:
ya da frutos, ya da flor
y me lo admira la gente....

martes, 12 de marzo de 2013

DESCANSO


Con ternura, con paz, con inocencia,
con una blanda tristeza o el cansancio
que viene a ser un perro fiel que acariciamos,
estoy sentado en mi sillón y soy feliz,
y soy feliz
porque no siento la necesidad de pensar algo preciso.

Con una fatiga que no es un desengaño,
con un gozo que no alienta esperanzas,
estoy en mi sillón, y estoy
en algo que quizás sólo es amor.

Sé que floto
y nada me parece sin embargo indiferente;
sé que nada me alegra ni me duele
y que sin embargo todo me enternece;
sé que eso es el amor,
o que quizá solamente es un dulce cansancio;
sé que soy feliz
porque no siento la necesidad de pensar algo preciso.

lunes, 11 de marzo de 2013

Rocío




De Sevilla un patio "salpicao" de flores,
una fuente en medio con un surtidor,
rosas y claveles de todos colores,
que no los soñaba mejor ni un pintor.
Tras de su cancela de hierro "forjao",
hay una mocita de tez "bronceá",
y juntito a ella, moreno y "plantao",
un mozo "encendío", que hablándole está.

La luna rosa de plata
bañó el patio con su luz,
muy cerquita de su novia
dijo el mocito andaluz:

"Rocío, ¡ay mi Rocío!
Manojito de claveles,
capullito "florecío".
De pensar en tus "quereres"
voy a perder el "sentío"
porque te quiero mi "vía"
como a nadie yo he "querío"
Rocío, ¡ay mi Rocío!"

Ahora es otro el patio "salpicao" de rosas,
patio de las monjas de la "Cariá",
donde hasta la fuente llora silenciosa,
la canción amarga de su soledad.
Regando las flores hay una monjita
que como ella tiene carita de flor,
y que se parece a aquella mocita,
que tras la cancela, le hablaba de amor.

La luna rosa de plata,
el patio "bañao" de luz,
más ya no suena esa copla
de aquel mocito andaluz:

"Rocío, ay mi Rocío…"

domingo, 10 de marzo de 2013

SEÑORES DEL SUR




Señores del sur
he comprometido mis raíces con ustedes
mi palabra llegará como un río
a recoger la tierra y su origen
Llámenme agricultor
cuando el trigo se despierte
cuando cruja la semilla
y el invierno se levante en una mano
Llámenme soldado
cuando el agua y la piedra se reúnan
entonces seré el puñal
que desgarre ceniza y envoltura
No digan al Maule como me llamo
me reconocerá por la voz
por los susurros que mis labios
llevarán hasta su lecho
No digan nada en Constitución
o en Pelluhue o en Chanco o en Curanipe
mi nombre fue encontrado en una ola
no es necesario que digan nada
Señores del sur
mi casa es mi mejor emblema
Pueden ver a través de las ventanas
o a través de mis ojos
lo que les tengo preparado
Abriré de una en una mis heridas
y escupiré poemas en vez de sangre
y a todos les diré mi nombre
Porque no quiero ver a Pedro
arrinconado en un museo
o a Manuel Francisco
retenido en una boca
Ellos sabían cantar
eran dos vientos de distinto oficio
dos gotas que el Maule
sacudió con violencia
Y yo ¿quién soy?
algo tengo de todos
cara de pan o de hormiga
muslos comprometidos
con el sabor de la tierra
hombros de padre
dientes de inquilino o de patrón
Soy una flor con espinas
y pétalos de mármol
un poema preparado
con la lluvia de cada día

sábado, 9 de marzo de 2013

Porque se llama Manuel




Porque se llama Manuel
y Machado se apellida,
en su verso Muerte y Vida
juegan partida y nivel.
¿Quién vence? Tablas. Y él,
banderillero de Apolo,
supo, cantó y está solo:
ese poeta chapado
que se apellida Machado
y le llamaban Manolo.