martes, 14 de mayo de 2013
Ni me entiendo ni me entienden...
Ni me entiendo ni me entienden...
Ni me entiendo ni me entienden;
ni me sirve alma ni sangre;
lo que veo con mis ojos
no lo quiero para nadie.
Todo es extraño a mí misma,
hasta la luz, hasta el aire,
porque ni acierto a mirarla;
ni sé cómo respirarle.
Y si miro hacia la sombra
donde la luz se deshace,
temo también deshacerme
y entre la sombra quedarme
confundida para siempre
en ese misterio grande.
lunes, 13 de mayo de 2013
No todo estaba dicho
No todo estaba dicho
Entre tú y yo el cielo ahogaba a su presa
entre el orden y tú la fuga encamaba a sus peldaños
entre el ala y yo el alba amaba su sangre fría
Entre tú y yo los verdores innatos soltaron
el pecho de vidrio y de trueno
arrastrando carriles de espuma gracia inútil
en los parajes dolorosos para una sola persona
Escombros de llanura por todas partes donde la boca serpea
cuando mi cadáver aún está en su casa.
domingo, 12 de mayo de 2013
Sonetos
Amor
¡Primavera feroz! Va mi ternura
por las más hondas venas derramada,
fresco hontanar, y furia desvelada,
que a extenuante pasmo se apresura.
¡Oh qué acezar, qué hervir, oh, qué premura
de hallar, en la colina clausurada,
la llaga roja de la cueva helada,
y su cura más dulce, en la locura!
¡Monstruo fugaz, espanto de mi vida,
rayo sin luz, oh tú, mi primavera,
mi alimaña feroz, mi arcángel fuerte!
¿Hacia qué hondón sombrío me convida,
desplegada y astral, tu cabellera?
¡Amor. amor, principio de la muerte!
sábado, 11 de mayo de 2013
LA ORILLA DEL MAR
LA ORILLA DEL MAR
No es agua ni arena
la orilla del mar.
El agua sonora
de espuma sencilla,
el agua no puede
formarse la orilla.
Y porque descanse
en muelle lugar,
no es agua ni arena
la orilla del mar.
Las cosas discretas,
amables, sencillas;
las cosas se juntan
como las orillas.
Los mismo los labios,
si quieren besar.
No es agua ni arena
la orilla del mar.
Yo sólo me miro
por cosa de muerto;
solo, desolado,
como en un desierto.
A mí venga el lloro,
pues debo penar.
No es agua ni arena
la orilla del mar.
la orilla del mar.
El agua sonora
de espuma sencilla,
el agua no puede
formarse la orilla.
Y porque descanse
en muelle lugar,
no es agua ni arena
la orilla del mar.
Las cosas discretas,
amables, sencillas;
las cosas se juntan
como las orillas.
Los mismo los labios,
si quieren besar.
No es agua ni arena
la orilla del mar.
Yo sólo me miro
por cosa de muerto;
solo, desolado,
como en un desierto.
A mí venga el lloro,
pues debo penar.
No es agua ni arena
la orilla del mar.
viernes, 10 de mayo de 2013
Coplas
13
Mira qué triste está el cielo,
mira qué sendas tan solas,
mira con cuánta amargura
se van quejando las hojas.
jueves, 9 de mayo de 2013
HABLA TAMBIEN TU
HABLA TAMBIEN TU
Habla también tú,
habla el último,
di tu sentencia.
Habla —
Pero no separes el No del Sí.
Dale a tu sentencia también el sentido:
dale la sombra.
Dale sombra suficiente,
dale tanta
como sepas repartida en torno a ti entre
medianoche y mediodía y medianoche.
Mira en torno:
ve cuánta vida hay en derredor —
¡Cuando la muerte! ¡Vida!
Verdad habla quien habla sombra.
Pero ahora se atrofia el lugar donde estás:
¿Adónde ahora, el más desnudo de sombra, adónde?
Escala. Palpa hacia arriba.
¡Más delgado te haces, más inconocible, más tenue!
Más tenue: un hilo,
por donde quiere descender, la estrella:
para nadar abajo, abajo,
donde ella se ve brillar: en la resaca
de palabras errantes.
miércoles, 8 de mayo de 2013
El último hotel
El último hotel
Yo puedo ver la pared negra
Yo puedo ver la silueta en la ventana
Él está hablando
Yo no estoy interesado en lo que dice
Sólo me interesa el hecho de que éste es
el último hotel
El último hotel
Fantasmas en mi cama
Hombres lascivos de los que me aproveché
El último hotel
martes, 7 de mayo de 2013
LAS ZAPATILLAS ROJAS
LAS ZAPATILLAS ROJAS
Todo un camino amarillo bajo el cielo
gris de asfalto ante los edificios
esperan mis huellas.
La confirmación que existo
dentro de un pie enfundado
en un zapato de tacón
que camina.
Todo un camino amarillo bajo el cielo
gris de asfalto ante los edificios
esperan mis huellas.
La confirmación que existo
dentro de un pie enfundado
en un zapato de tacón
que camina.
.
Los tuve en mis pies
era una vieja niña.
Nunca me los quito
ni los desempolvo.
Era una niña vieja
cuando me llevaban.
Los tuve en mis pies
era una vieja niña.
Nunca me los quito
ni los desempolvo.
Era una niña vieja
cuando me llevaban.
.
Dejo huellas
libres, impresas
en el camino amarillo.
Nada
me ata sus pasos al cuello.
Sueño como una loca
con un par nuevo
de lentejuelas rojas.
.
Así
libre
calzando
zapatos rojos
desnuda de dogmas
es como me quiero.
Dejo huellas
libres, impresas
en el camino amarillo.
Nada
me ata sus pasos al cuello.
Sueño como una loca
con un par nuevo
de lentejuelas rojas.
.
Así
libre
calzando
zapatos rojos
desnuda de dogmas
es como me quiero.
lunes, 6 de mayo de 2013
Guadalquivir
GUADALQUIVIR
En su nacimiento, en Cazorla.
¡Detente aquí, viajero! En estas peñas
nace el que es y será rey de los ríos,
entre pinos gigantes y bravíos,
que arrullan su nacer y ásperas breñas.
El reflejo otro tiempo las enseñas,
las armas, los corceles y atavíos
de razas imperiosas, cuyos bríos
postráronse en sus márgenes risueñas
ensancha entre olivos y trigales,
y al mar corre a rendirle sus cristales.
Mas coma lleva sal de Andalucía,
sus aguas vuelve a las del mar iguales,
para llegar mas lejos todavía...
Y así van sus caudales,
triunfantes en el seno de las olas,
a las playas de América españolas.
domingo, 5 de mayo de 2013
Ven. Ven. Así. Te beso
Ven. Ven. Así. Te beso. Te arranco. Te arrebato. Te compruebo en lo oscuro, ardiente oscuridad, abierta, negra, oculta derramada golondrina, oh tan azul, de negra, palpitante. Oh así, así, ansiados, blandos labios undosos, piel de rosa o corales delicados, tan finos. Así, así, absorbidos, más y más, succionados. Así, por todo el tiempo. Muy de allá, de lo hondo, dulces ungüentos desprendidos, amados, bebidos con frenesí, amor hasta desesperados. Mi único, mi solo, solitario alimento, mi húmedo, lloviznado en mi boca, resbalado en mi ser. Amor. Mi amor. Ay, ay. Me dueles. Me lastimas. Ráspame, límame, jadéame tú a mí, comienza y recomienza, con dientes y garganta, muriendo, agonizando, nuevamente volviendo, falleciendo otra vez, así por siempre, para siempre, en lo oscuro, quemante oscuridad, uncida noche, amor, sin morir y muriendo, amor, amor, amor, eternamente.
sábado, 4 de mayo de 2013
ILUSIONES PERDIDAS
ILUSIONES PERDIDAS
Hoja del árbol caída en infancia
hoja caída de rodillas
en el centro de su olvido
dulce juguete de esperanzas y relámpagos
sangrando la cabeza malherida
como las ilusiones ópticas
en su palacio de muerte inolvidable
constante barco de corazón doliente
entre naufragio y sombra apresurada.
Hoja del nudo caído en árbol caído en infancia
adónde te arrastran hoja de dulce corazón
y los excesos del fuego de las águilas visuales
hojas de las ramas calefaccionables
detenidas en el aire
prontas a podredumbre entre sus propios brazos
como las aguas embrujadas.
viernes, 3 de mayo de 2013
LA LLUVIA
LA LLUVIA
Bruscamente la tarde se ha aclarado
Porque ya cae la lluvia minuciosa.
Cae o cayó. La lluvia es una cosa
Que sin duda sucede en el pasado.
Quien la oye caer ha recobrado
El tiempo en que la suerte venturosa
Le reveló una flor llamada rosa
Y el curioso color del colorado.
Esta lluvia que ciega los cristales
Alegrará en perdidos arrabales
Las negras uvas de una parra en cierto
Patio que ya no existe. La mojada
Tarde me trae la voz, la voz deseada,
De mi padre que vuelve y que no ha muerto.
jueves, 2 de mayo de 2013
BALADILLA DE LOS TRES PUÑALES
BALADILLA DE LOS TRES PUÑALES
He comprado tres puñales
para que me des la muerte...
El primero, indiferencia,
sonrisa que va y que viene
y que se adentra en la carne
como una rosa de nieve.
El segundo, de traición;
mi espalda ya lo presiente,
dejando sin primavera
un árbol de venas verdes.
Y el último acero frío,
por si valentía tienes
y me dejas, cara a cara,
amor, de cuerpo presente.
He comprado tres puñales
para que me des la muerte...
miércoles, 1 de mayo de 2013
También el mar, hoy...
También el mar, hoy,
tiene el alma llena de madurez.
-Se le oye la adolescencia
en el vidrio del aire
llena de fragmentos de vísperas
y de intactas navegaciones oscuras.-
Así. Más allá. Ahora de la sombra:
¿No te duele el canto,
-redondez tibia de beso preciso-
del sol en la sombra?
martes, 30 de abril de 2013
MORIR
MORIR
En el más cariñoso lecho
me siento morir,
cuando en la naturaleza,
toda mansa como jardín.
Muelle, el ala del ángel blanco
¡qué piedad, que ternura al fin!—
primera vez roza mis hombros
como el arco roza el violín.
Esta frescura de saber
que también nos vamos de aquí,
¡qué novedad en la conciencia,
qué persuasión blanda y sutil!
¡Qué conformidad, que tersura,
qué dejarse ir!
Sus filos y puntas los actos
redondean al llegar a mí.
Ni la sangría del estoico
que se amenguaba sin sentir,
ni el áspid que penas besaba
el botón de ansioso carmín:
Lento declive, y tan seguro
—hinchado de sí—
que ni da lugar a lamentos
ni a temores, ni
siquiera al vago cosquilleo
de ese minuto por venir
en que se ha de abrir a mis ojos
algo que se tiene que abrir.
¡Qué natural lo que se acaba
cuando ya se acaba por sí!
Voy con la razón satisfecha,
dormido, contento, feliz.
¡Y yo que viví tantos años,
tantos años como perdí,
sin dar oídos a la esfinge
que susurraba junto a mí!
Yo no sabía que la vida
se reclina y se tiene así
en esa gula de la nada
que es su diván, es su cojín.
me siento morir,
cuando en la naturaleza,
toda mansa como jardín.
Muelle, el ala del ángel blanco
¡qué piedad, que ternura al fin!—
primera vez roza mis hombros
como el arco roza el violín.
Esta frescura de saber
que también nos vamos de aquí,
¡qué novedad en la conciencia,
qué persuasión blanda y sutil!
¡Qué conformidad, que tersura,
qué dejarse ir!
Sus filos y puntas los actos
redondean al llegar a mí.
Ni la sangría del estoico
que se amenguaba sin sentir,
ni el áspid que penas besaba
el botón de ansioso carmín:
Lento declive, y tan seguro
—hinchado de sí—
que ni da lugar a lamentos
ni a temores, ni
siquiera al vago cosquilleo
de ese minuto por venir
en que se ha de abrir a mis ojos
algo que se tiene que abrir.
¡Qué natural lo que se acaba
cuando ya se acaba por sí!
Voy con la razón satisfecha,
dormido, contento, feliz.
¡Y yo que viví tantos años,
tantos años como perdí,
sin dar oídos a la esfinge
que susurraba junto a mí!
Yo no sabía que la vida
se reclina y se tiene así
en esa gula de la nada
que es su diván, es su cojín.
lunes, 29 de abril de 2013
Arte
Arte
Arte, palabra divina
que gloria al talento augura;
plácida luz que fulgura
sobre una santa colina;
pura fuente cristalina;
águila de eterno vuelo;
ángel que canta en el suelo
melancólicos amores,
brindando al talento flores
de los jardines del cielo.
Por él, titán soberano
Miguel Ángel se agiganta,
y hasta los cielos levanta
la cruz del templo cristiano;
por él, arranca Ticiano
al cielo su luz hirviente,
y por él, Osián potente,
dando formas a la idea
como Dios, al gritar SEA
lanza un mundo de su frente.
Por él, el gran Cicerón,
águila de la elocuencia,
sube al templo de la ciencia
escalón por escalón:
por él, con mística unción
canta David sus creaciones;
y por ceñir sus blasones
le dan a su gloria fieles,
Cano y Van Dijk), sus pinceles;
Lope y Dante sus canciones.
Por él, el genio sediento
que eternos templos se labra,
da seres a la palabra
y a las rocas pensamiento;
ante su potente aliento,
la tierra cede sin tino;
pues el mar, el torbellino,
la luz, el monte, la aurora,
son una creación sonora
que hizo un Artista Divino.
Por él, la mente se agita;
por él, vive la esperanza;
por él, la dicha se alcanza;
por él, la conciencia grita;
su luz es siempre bendita,
y su poder tan profundo,
que un rey, Felipe segundo,
porque el Orbe no le viera,
arrojó el arte de Herrera
entre su tumba y el mundo.
A los ecos de su nombre
que aromas de gloria lleva,
el hombre hasta Dios se eleva,
y Dios desciende hasta el hombre;
a nadie su altura asombre
teniendo fuerza y aliento,
pues a ese alcázar que el viento
arrulla sobre alto muro,
se llega con pie seguro
por la escala del talento.
Genio que a la altiva cumbre
te vas alzando valiente,
ansiando ceñir tu frente
con un rayo de su lumbre;
sigue... y si en la muchedumbre
protesta algún ser artero
contra el arte que venero,
dile con desdén profundo,
que es la primera obra, el mundo,
Dios, el artista primero.
domingo, 28 de abril de 2013
Qué a gusto sería
Qué a gusto sería
sombra de tu cuerpo
¡Todas las horas del día de cerca
te iría siguiendo!
Y mientras la noche
reinara en silencio,
toda la noche tu sombra estaría
pegada a tu cuerpo.
Y cuando la muerte
llegara a vencerlo,
sólo una sombra por siempre serían
tu sombra y tu cuerpo.
sábado, 27 de abril de 2013
Llamaron a mi corazón
A mi corazón llamaron:
corrí a abrir con vida y alma.
Veo en la puerta a mi Amor
con una cruz que me espanta.
-Pasad, si os place, Señor,
pasad, que ésta es vuestra casa;
si sólo una choza es,
haced de ella vuestro alcázar.
Y, haciendo mi noche día,
Jesús entró en mi morada;
pero al entrar en mi pecho
dejó la cruz en mi espalda.
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