sábado, 14 de marzo de 2015

ELEGÍA Y RECUERDO DE LA CANCIÓN FRANCESA






C' est une chanson
qui nous ressemble.
Kosma y Prévert: Les feuilles mortes

Os acordáis: Europa estaba en ruinas.
Todo un mundo de imágenes me queda de aquel tiempo
descoloridas, hiriéndome los ojos
con los escombros de los bombardeos.
En España la gente se apretaba en los cines
y no existía la calefacción.

Era la paz -después de tanta sangre--
que llegaba harapienta, como la conocimos
durante cinco años.
Y todo un continente empobrecido,
carcomido de historia y de mercado negro,
de repente nos fue más familiar.

¡Estampas de la Europa de post-guerra
que parecen mojadas en lluvia silenciosa,
ciudades grises adonde llega un tren
sucio de refugiados: cuántas cosas
de nuestra historia próxima trajisteis, despertando
la esperanza en España, y el temor!

Hasta el aire de entonces parecía
que estuviera suspenso, como si preguntara,
y en las viejas tabernas de barrio
los vencidos hablaban en voz baja...
Nosotros, los más jóvenes, como siempre esperábamos
algo definitivo y general.

Y fue en aquel momento, justamente
en aquellos momentos de miedo y esperanzas
-tan irreales, ay- que apareciste,
oh rosa de lo sórdido, manchada
creación de los hombres, arisca, vil y bella
canción francesa de mi juventud!

Eras lo no esperado que se impone
a la imaginación, porque es así la vida,
tú que cantabas la heroicidad canalla,
el estallido de las rebeldías
igual que llamaradas, y el miedo a dormir solo,
la intensidad que aflige al corazón.

Cuánto enseguida te quisimos todos!
En tu mundo de noches, con el chico y la chica
entrelazados, de pie en un quicio oscuro,
en la sordina de tus melodías,
un eco de nosotros resonaba exaltándonos
con la nostalgia de la rebelión.

Y todavía, en la alta noche, solo,
con el vaso en la mano, cuando pienso en mi vida,
otra vez más sans faire du bruit tus músicas
suenan en la memoria, como una despedida:
parece que fue ayer y algo ha cambiado.
Hoy no esperamos la revolución.

Desvencijada Europa de post-guerra
con la luna asomando tras las ventanas rotas,
Europa anterior al milagro alemán,
imagen de mi vida, melancólica!
Nosotros los de entonces, ya no somos los mismos,
aunque a veces nos guste una canción.

viernes, 13 de marzo de 2015

LA MUJER ESTABA DESNUDA...







LA MUJER ESTABA DESNUDA...

La mujer estaba desnuda.

Llegó un hombre,
descendió a su sexo.
Desde allí la llamaba
a voces cóncavas,
a empozados lamentos.
Pero ella
no podía bajar
y asomada a los bordes sollozaba.

Después, la voz, más tenue
cada día,
ya se iba perdiendo en remotos vellones.

La mujer sollozaba.

Tendió grandes pañuelos
en las lámparas rotas.

Vino la noche.

Y la mujer abrió de par en par
sus inexhaustas puertas.

jueves, 12 de marzo de 2015

ARMONÍA






ARMONÍA

Quise tocar el gozo primitivo,
batir mis alas, trasponer la linde
y volver, al origen, desde el fin de
mi juventud, para sentirme vivo.
Quise reverdecer el viejo olivo
de la paz, pero el alma se me rinde.
¿Quién es sin su dolor? ¿Quién que no brinde,
sin pena, su ayer libre a su hoy cautivo?
Y ¿quién se adueñará de la armonía
universal, si rompe, nota a nota,
grano a grano, el racimo, los acordes?
¿Quién se olvida que es cuna y tumba, día
y noche, honda raíz y flor que brota,
luz, sombra, vida y muerte hasta los bordes?

(De Quinta del 42, 1952

miércoles, 11 de marzo de 2015

A LA INMENSA MAYORÍA







A LA INMENSA MAYORÍA

Aquí tenéis, en canto y alma, al hombre 
aquel que amó, vivió, murió por dentro 
y un buen día bajó a la calle: entonces 
comprendió: y rompió todos sus versos. 

Así es, así fue. Salió una noche 
echando espuma por los ojos, ebrio 
de amor, huyendo sin saber adónde: 
a donde el aire no apestase a muerto. 

Tiendas de paz, brizados pabellones, 
eran sus brazos, como llama al viento; 
olas de sangre contra el pecho, enormes 
olas de odio, ved, por todo el cuerpo. 

¡Aquí! ¡Llegad! ¡Ay! Ángeles atroces 
en vuelo horizontal cruzan el cielo; 
horribles peces de metal recorren 
las espaldas del mar, de puerto a puerto. 

Yo doy todos mis versos por un hombre 
en paz. Aquí tenéis, en carne y hueso, 
mi última voluntad. Bilbao, a once 
de abril, cincuenta y uno. 

martes, 10 de marzo de 2015

EL NIÑO DE LA PALMA (CHUFLILLAS)






EL NIÑO DE LA PALMA (CHUFLILLAS)


¡Qué revuelo!
¡Aire, que al toro torillo
le pica el pájaro pillo
que no pone el pie en el suelo!
¡Qué revuelo!
Ángeles con cascabeles
arman la marimorena,
plumas nevando en la arena
rubí de los redondeles.
La Virgen de los caireles
baja una palma del cielo.
¡Qué revuelo!
—Vengas o no en busca mía,
torillo mala persona,
dos cirios y una corona
tendrás en la enfermería.
¡Qué alegría!
¡Cógeme, torillo fiero!
¡Qué salero!
De la gloria, a tus pitones,
bajé, gorrión de oro,
a jugar contigo al toro,
no a pedirte explicaciones.
¡A ver si te las compones
y vuelves vivo al chiquero!
¡Qué salero!
¡Cógeme, torillo fiero!
Alas en las zapatillas,
céfiros en las hombreras,
canario de las barreras,
vuelas con las banderillas.
Campanillas
te nacen en las chorreras.
¡Qué salero!
¡Cógeme, torillo fiero!
Te digo y te lo repito,
para no comprometerte,
que tenga cuernos la muerte
a mí se me importa un pito.
Da, toro torillo, un grito
y, ¡a la gloria en angarillas!
¡Qué salero!
¡Que te arrastran las mulillas!
¡Cógeme, torillo fiero!

lunes, 9 de marzo de 2015

LA POESÍA ES UN ARMA CARGADA DE FUTURO







LA POESÍA ES UN ARMA CARGADA DE FUTURO

Cuando ya nada se espera personalmente exaltante, 
más se palpita y se sigue más acá de la conciencia, 
fieramente existiendo, ciegamente afirmando, 
como un pulso que golpea las tinieblas, 
que golpea las tinieblas. 

Cuando se miran de frente 
los vertiginosos ojos claros de la muerte, 
se dicen las verdades; 
las bárbaras, terribles, amorosas crueldades. 

Se dicen los poemas
que ensanchan los pulmones de cuantos, asfixiados,
piden ser, piden ritmo,
piden ley para aquello que sienten excesivo,
Con la velocidad del instinto,
con el rayo del prodigio,
como mágica evidencia, lo real se nos convierte
en lo idéntico a sí mismo.

Poesía para el pobre, poesía necesaria 
como el pan de cada día, 
como el aire que exigimos trece veces por minuto, 
para ser y en tanto somos, dar un sí que glorifica. 

Porque vivimos a golpes, porque apenas si nos dejan 
decir que somos quien somos, 
nuestros cantares no pueden ser sin pecado un adorno. 
Estamos tocando el fondo.

Maldigo la poesía concebida como un lujo 
cultural por los neutrales 
que, lavándose las manos se desentienden y evaden. 
Maldigo la poesía de quién no toma partido 
partido hasta mancharse. 

Hago mías las faltas. Siento en mí a cuantos sufren, 
y canto respirando. 
Canto y canto y cantando más allá de mis penas, 
de mis penas 
personales, me ensancho. 

Quiero daros vida, provocar nuevos actos, 
y calculo por eso, con técnica que puedo. 
Me siento un ingeniero del verso y un obrero 
que trabaja con otros a España en sus aceros. 

Tal es mi poesía: poesía-herramienta
a la vez que latido de lo unánime y ciego.
Tal es, arma cargada de futuro expansivo
con que te apunto al pecho.
No es una poesía gota a gota pensada. 
No es un bello producto. No es un fruto perfecto. 
Es algo como el aire que todos respiramos
y es el canto que espacia cuanto dentro llevamos.


Son palabras que todos repetimos sintiendo 
como nuestras, y vuelan. Son más que lo mentado.
Son lo más necesario: lo que no tiene nombre 
Son gritos en el cielo, y en la tierra son actos. 

domingo, 8 de marzo de 2015

MEDIA NOCHE







MEDIA NOCHE

(Málaga, 6 de enero)

Duerme la calma en el puerto 
bajo su colcha de laca, 
mientras la luna en el cielo 
clava sus anclas doradas. 
¡Corazón, 
rema!

sábado, 7 de marzo de 2015

EL MULO MOLA




EL MULO MOLA



El hijo de la gran Mula

por Mola vino a las malas.

Como no tuvo soldados,


los hizo con las sotanas.

De lejos, el traidor Franco

solo promesas le manda,

y tomándolo por Muño

le anuncia tropas mulatas.

Ya están pidiendo madrinas

las tropas de las mejalas.


La media Luna ya tiene

protección de las beatas.

¡Cómo curan sus heridos,

cómo el moro les regala

sangrientos ramos de flores

llenos de orejas cortadas!

En mulas van hacia Mola

pidiendo e gritos la paga.

Mola los mueles con marcos,

ya caducos, de Alemania.

¡Fiero moro, te engañaron,

te van a engañar, te engañan!

De todas partes por radio

llegan las voces cascadas


de generales borrachos

diciendo botaratadas.

Mientras que contra los cuentos

que los fascistas levantan,

las hoces y los martillos

chocan sus verdades claras.

Las Milicias van cantando

su alegría en la batalla,

victoriosas de la muerte

que acecha a sus milicianas;

siempre poniendo los ojos

en donde ponen las balas.

Asoma la luz del día

enfrente de Guadarrama,

ensangrentando de albores

las luces de la esperanza.

Al otro lado del monte

está la muerte de España.

viernes, 6 de marzo de 2015

DESNUDO









DESNUDO


Blancos, rosas... Azules casi en veta, 
retraídos, mentales. 
Puntos de luz latente dan señales 
de una sombra secreta. 
Pero el color, infiel a la penumbra, 
se consolida en masa. 
Yacente en el verano de la casa, 
una forma se alumbra. 
Claridad aguzada entre perfiles, 
de tan puros tranquilos 
que cortan y aniquilan con sus filos 
las confusiones viles. 
Desnuda está la carne. Su evidencia 
se resuelve en reposo. 
Monotonía justa: prodigioso 
colmo de la presencia. 
¡Plenitud inmediata, sin ambiente, 
del cuerpo femenino! 
Ningún primor: ni voz ni flor. ¿Destino? 
¡Oh absoluto presente!

jueves, 5 de marzo de 2015

SE TODOS LOS CUENTOS






SE TODOS LOS CUENTOS
Yo no sé muchas cosas, es verdad
Digo tan sólo lo que he visto.
Y he visto:
que la cuna del hombre la mecen con cuentos...
Que los gritos de angustia del hombre los ahogan con cuentos...
Que el llanto del hombre lo taponan con cuentos...
Que los huesos del hombre los entierran con cuentos...
Y que el miedo del hombre
ha inventado todos los cuentos.
Yo no sé muchas cosas es verdad.
Pero me han dormido con todos los cuentos...
Y sé todos los cuentos.