lunes, 30 de abril de 2012

Yolleo


Eh vos
tatacombo
soy yo

no me oyes
tataconco
soy yo sin vos
sin voz
aquí yollando
con mi yo sólo solo que yolla y yolla y yolla
entre mis subyollitos tan nimios micropsíquicos
lo sé
lo sé y tanto,
desde el yo mero mínimo al verme yo, harto en todo
junto a mis ya muertos y revivos yoes siempre siempre yollando
y yoyollando siempre
por qué
Si sos
por qué dí
eh vos
no me oyes
tatatodo
por qué tanto yollar
responde
y hasta cuándo...

domingo, 29 de abril de 2012

EPITAFIO DE UN POETA



Yo canté las cosas naturales
en el momento en que las cosas naturales se extinguían.
Amé la tierra y las cosas de la tierra
cuando la tierra y las cosas de la tierra
eran destruidas por el hombre.
Mi poesía cabalgó hacia el campo huyendo de la ciudad
cuando la gente del campo abandonaba el campo
y se venía a la ciudad.
El canto no se escuchaba en la ciudad
porque la ciudad estaba llena de ruido
pero mi canto no se escuchó tampoco en el campo
porque el campo estaba lleno de soledad.
He abandonado la prosa y me he ido en busca de la poesía
cuando la poesía abandonaba la poesía
y se entregaba en manos de la prosa.
El poeta siempre llega donde nadie lo recibe
y así vive hasta que llega a la muerte;
solo entonces, cuando la muerte tampoco lo recibe,
es cuando todos reciben su canto.

sábado, 28 de abril de 2012

Un sábado





Un hombre ciego en una casa hueca
Fatiga ciertos limitados rumbos
Y toca las paredes que se alargan
Y el cristal de las puertas interiores
Y los ásperos lomos de los libros
Vedados a su amor y la apagada
Platería que fue de los mayores
Y los grifos del agua y las molduras
Y unas vagas monedas y la llave.
Está solo y no hay nadie en el espejo.
Ir y venir. La mano roza el borde
Del primer anaquel. Sin proponérselo,
Se ha tendido en la cama solitaria
Y siente que los actos que ejecuta
Interminablemente en su crepúsculo
Obedecen a un juego que no entiende
Y que dirige un dios indescifrable.
En voz alta repite y cadenciosa
Variaciones de verbos y de epítetos
Y bien o mal escribe este poema

viernes, 27 de abril de 2012




Yo detesto las rosas;
una rosa me encanta.

Yo detesto los árboles;
pero un álamo, un chopo,
un níspero, un olivo
son como gente mía.
Yo detesto las piedras,
pero el agua-marina,
la esmeralda, el topacio
y el profundo zafiro
son almas misteriosas
que agrada sondear.
Yo detesto la música,
pero este cante jondo
esta copla que es mía
desde todos los tiempos,
esta copla que llora
cantando y que se canta
gimiendo, es de mi sangre:
se llama Soledad.

jueves, 26 de abril de 2012

Con el pasar de los años y los otoños




Con el pasar de los años y los otoños
Supe ser poeta...
Loco, amante y vagabundo.
Lo que siempre quise ser.
Aprendí de utopías y delirios
De alquimias y sueños de estrellas fugaces
De enamorarse de la imperfección de la mujer
Y que los años como las penas
No pasan en vano,
Pero pasan… pasan.

miércoles, 25 de abril de 2012

El dignatario







El dignatario fiel, el dignatario,
es hombre servicial y necesario
que, con puntualidad de funcionario,
siempre aplaude el decir comunitario.
Queda muy evidente el corolario:
seguro servidor, el dignatario.

El dignatario piensa, el dignatario,
que si bien tiene el alma en el almario,
el disentir es algo primario,
y más vale aceptar el horario
de padre de la patria formulario.
Qué hacendoso y qué bien, el dignatario.

El dignatario, lúcido y suntuario,
se opone al debatir parlamentario,
y aprende de memoria un diccionario
de idénticas palabras: silabario
que sólo dice "si" muy solidario.
Qué histórica misión, el dignatario

martes, 24 de abril de 2012

La cigarra




Canta tu estrofa, cálida cigarra,
y baile al son de tu cantar la mosca,
que ya la sierpe en el zarzal se enrosca
y lacia extiende su verdor la parra.

Desde la yedra que a la vid se agarra
y en su cortina espléndida te embosca,
recuerda el caño de la fuente tosca
y el fresco muro de la limpia jarra.

No consientan tus élitros fatiga,
canta del campo el productivo costo,
ebria de sol y del trabajo amiga.

Canta y excita al inflamado agosto
a dar el grano de la rubia espiga
y el chorro turbio del ardiente mosto.

lunes, 23 de abril de 2012

POÉTICA


Amar por el placer de amar,
pero no sólo.
Zambullirse en la vida
no sólo por el gusto de gozarla.
Probar todos los frutos
para saber qué ocultan y a qué saben.
Comer para rumiar.
Vivir para contarlo.
Volverlo a intentar, 1989.

domingo, 22 de abril de 2012

Europa



EUROPA no habla griego, que habla gringo    
Creyendo que está hablando el europeo:      
Babélico balido y balbuceo                  
Que se americaniza de vikingo.              
Nunca soñó un imperio Carolingo            
Tan incontinental cocacoleo.                
Ni encontró un Bonaparte a su deseo        
Tal respuesta, responso, ni respiro.        
Respuesta que es apuesta y desatina.        
Responso a la difunta Gran Bretaña.        
Respingo que lo da quien más se empina.    
Y mientras se la ignora o se la extraña    
A una Europa, que, al serlo, fue latina,    
Ya no se habla en cristiano ni en España.  

sábado, 21 de abril de 2012

Odio



Oh, primavera de las amapolas,
tú que floreces para bien mi casa,
luego que enjoyes las corolas,
pasa.

Beso, la forma más voraz del fuego,
clava sin miedo tu endiablada espuela,
quema mi alma, pero luego,
vuela.



Risa de oro que movible y loca
sueltas el alma, de las sombras, presa,
en cuanto asomes a la boca,
cesa.



Lástima blanda del error amante
que a cada paso el corazón diluye,
vuelca tus mieles y al instante,
huye.



Odio tremendo, como nada fosco,
odio que truecas en puñal la seda,
odio que apenas te conozco,
queda.

viernes, 20 de abril de 2012

POEMA DE LOS DONES



Nadie rebaje a lágrima o reproche
Esta declaración de la maestría
De Dios, que con magnífica ironía
Me dio a la vez los libros y la noche.

De esta ciudad de libros hizo dueños
A unos ojos sin luz, que sólo pueden
Leer en las bibliotecas de los sueños
Los insensatos párrafos que ceden

Las albas a su afán. En vano el día
Les prodiga sus libros infinitos,
Arduos como los arduos manuscritos
Que perecieron en Alejandría.

De hambre y de sed (narra una historia griega)
Muere un rey entre fuentes y jardines;
Yo fatigo sin rumbo los confines
De esa alta y honda biblioteca ciega.

Enciclopedias, atlas, el Oriente
Y el Occidente, siglos, dinastías,
Símbolos, cosmos y cosmogonías
Brindan los muros, pero inútilmente.

Lento en mi sombra, la penumbra hueca
Exploro con el báculo indeciso,
Yo, que me figuraba el Paraíso
Bajo la especie de una biblioteca.

Algo, que ciertamente no se nombra
Con la palabra azar, rige estas cosas;
Otro ya recibió en otras borrosas
Tardes los muchos libros y la sombra.

Al errar por las lentas galerías
Suelo sentir con vago horror sagrado
Que soy el otro, el muerto, que habrá dado
Los mismos pasos en los mismos días.

¿Cuál de los dos escribe este poema
De un yo plural y de una sola sombra?
¿Qué importa la palabra que me nombra
si es indiviso y uno el anatema?

Groussac o Borges, miro este querido
Mundo que se deforma y que se apaga
En una pálida ceniza vaga
Que se parece al sueño y al olvido.

jueves, 19 de abril de 2012

Visita



No estoy.
No la conozco.
No quiero conocerla.
Me repugna lo hueco,
la afición al misterio,
el culto a la ceniza,
a cuanto se disgrega.
Jamás he mantenido contacto con lo inerte.
Si de algo he renegado es de la indiferencia.
No aspiro a transmutarme,
ni me tienta el reposo.
Todavía me intrigan el absurdo, la gracia.
No estoy para lo inmóvil,
para lo inhabitado.

Cuando venga a buscarme,
díganle:
"se ha mudado".

miércoles, 18 de abril de 2012

LA CULPA ES DE ESTE OFICIO

Alcorlo

La culpa es de este oficio. De tanto darle vueltas
a todo, todo acaba perdiendo consistencia.
Tanto jugar con fuego, que el jugador se quema
y nada importa nada si no ofrece un buen tema.
Juro que algunas noches me habría muerto, sin pena,
de poderlo contar después en un poema.
En la perfecta edad, 1982.

martes, 17 de abril de 2012

Manual de odio

Gordillo




Cuando ella o él te deje, no perdones,
niégate a comprenderlo, cultiva bien tu odio,
nunca seas generoso en palabras o en olvido.
Cuando ella o él te deje, nunca digas adiós o qué vamos a hacerle,
maldice cada letra de su nombre y júrale odio eterno mirándole a los ojos.
Cuando ella o él te deje, nunca creas ni justificaciones ni promesas
y busca las palabras más hirientes, el insulto más infame que conozcas.
Cuando ella o él te deje, nunca juegues provoca llanto dolor,
remordimientos y 
qué el adiós te corte igual que a una cuchilla.
Porque cuando ella o él te deja, 
habrá alguien tarde o temprano esperando en otra esquina 
y volveras a gozar en otros brazos y diras : "te amo". Y "ven dámelo todo".
Y olvidarás. ¿Para que mentir?
Que ella o él se lleven
aunque dure bien poco, nuestro odio,
igual que una bandera, para siempre... 

lunes, 16 de abril de 2012

YO VI LA GRANDE Y ALTA JERARQUÍA




SONETO

Yo vi la grande y alta jerarquía
del magno, invicto y santo Rey Tercero
en esta casa, y conocí lucero
al que en sagradas purpuras ardía.
Hoy desierta de tanta monarquía,
y del nieto, magnánimo heredero,
yace; pero arde en glorias de su acero,
como en la pompa que ostentar solía.
Menos invidia teme aventurado
que venturoso; el mérito procura;
los premios aborrece escarmentado.
¡Oh, amable, si desierta arquitectura,
más hoy al que te ve desengañado,
que cuando frecuentada en tu ventura!

Futuribles



Si consentimos la mordaza,
si respetamos la injusticia,
si obedecemos el escarnio,
si renegamos de ser libres,
cuánto temor por padecer.

Si no vivimos cara a cara,
si no estrechamos manos limpias,
si damos gritos de improperio,
si no cerramos los sepulcros,
nos regirá la mala ley.

Si no dejamos vino amargo,
si no apagamos luces tristes,
si somos voz del desaliento,
si nos vestimos de lujuria,
soportaremos sordidez.

Si no entregamos el pan tierno,
si no escanciamos alegría,
si calcinamos agua clara,
si fustigamos el reposo,
nos perderemos en la sed.

Si alzamos templos de rechazo,
si profanamos la advertencia,
si no entendemos la plegaria,
y si no vemos quién nos quiere,
nos quemará la desnudez.

domingo, 15 de abril de 2012

El camino




Sombrío es el camino y tortuoso
que a la Estigia conduce.
Creyeras que es la noche cuando avanzas,
y el sol no se ha dormido todavía,
pero las altas ramas
de pinos y cipreses
impiden todo atisbo de su luz.
Se oye a veces un trino
colmado de misterio
que suena a despedida
y casi también como advertencia.

Es sombrío el camino
que entre campos de loto
poco a poco desciende
tal la lenta serpiente hasta su presa.

Acaso aún lo ignoras,
pero noche tras noche,
cuando crees que sueñas,
pero día tras día,
cuando crees que vives,
recorres tu calzada pedregosa,
te acercas a las aguas del silencio.

sábado, 14 de abril de 2012

CERA VOTIVA EN WESTMINSTER ABBEY T.S.E.


CERA VOTIVA EN WESTMINSTER ABBEY

T.S.E.

Al marchitarse la rosa de la memoria
se adueñaron del jardín la ortiga y la cizaña.
Se vino abajo la pared. La verja
se me quedó en las manos, quebradiza,
y se volvió en el pozo fango fétido
el agua dulce y fresca de otros días.
Poeta de la edad de la penuria,
descendió a los infiernos sin Virgilio.
Ceniza, arena,
arena fugitiva entregada a la muerte.
Sobre la fosa,
la rosa ardiente permanece viva
mientras desgarren zarpas de silencio
la piel lívida del mar de horror. Augur,
sus uñas se adentraron
en la carne vacía de la noche.
Los años pasarán y hasta mil horas
se agotarán también. Pero habrá tiempo
para escribir palabras con sentido,
palabras que revienten de sentido
en cristal empañado y plata sucia.