sábado, 14 de junio de 2014

Poema del cÍrculo I



Todo lo que decimos
da vueltas y más vueltas
rueda desde nosotros a nosotros
baja por la pendiente
que llamamos espalda mundo ser
da vueltas y más vueltas
para encerrarnos juntos
en la bola de nieve en el alud
de círculos que van por la ladera
creciendo y retumbando
aplastando lo frágil
la huella de los lobos
y al Viejo Excursionista expulsado del cielo.


viernes, 13 de junio de 2014

Tú no estarás. Ya no...






Tú no estarás. Ya no.
En la última tarde tu mirada tenía
un dolor a jardines descuidados,
una luz huidiza y astillada,
un caminar de hombre con mirada de trapo,
y un corazón tartamudo.

Llevabas un temblor de naufragio y una venda en los ojos.
El temblor también es una forma de mirar.
Y tú temblabas mientras tu luz caía.
Crepitar es caer. Pero hacia dentro.

Estaba requiriendo una llamada.
Estabas demorándote
en aquellos días primeros del verano,
contra un presentimiento de invernadero triste,
de sangre requisada.

Perdido en las aduanas del corazón.
Supe que te morías por tus ojos.
Esos ojos que eran
con dolor a madera,
            con sabor a manzanas,
párpados de cobre
como cofres de lluvia
que se abrían con lástima.

Ahora todo es ausencia.
Los pájaros que encuentro,
el crujir de la tierra sobre la mansa lluvia,
el llanto de los niños detrás de las palabras.

A veces el pensamiento se ensombrece de pronto
y declina el mundo aún más deprisa
y nos sobreviene una noche destemplada, una herida negra.

Sé que me buscaste.
En esa larga noche de imperdibles sin rumbo,
en el instante mismo en que tu cuerpo
se astilló para siempre
y tu llama empezaba a ser fractura,
témpano,
camisa desplomándose.

El verano se acaba.
y los recuerdos ruedan
sobre los empedrados negros
            como regueros de sombra.

Y es cierto que tal vez puedas vivir años y años
sin regresar de una sonrisa

Y tú estás regresando
con el verdor de los arces en la lluvia
sobre la claraboya más blanca de la luz.

Y tu frente ha tomado
la difícil transparencia del brezo o la retama.

Y veo descarriarse de pronto
aquel ovillo de lana triste
que fue toda mi infancia,
aquella habitación de costurera
aquel balcón solaz
            que de muy niña

se asomaba al clamor hirviente de las calles,
y ahora lo veo todo
irse desmadejándose encima de tu cuerpo,
detrás
    detrás
        detrás
            y todavía

mi pequeño puñal de niña sin palabras,

DEPRISA,
        MÁS,
            CAER
                Y SIN EMBARGO,
un cuerpo que se rompe,
                EL CABO FINAL DE LA MADEJA,
aquel reloj de arena creciendo
                    desmesuradamente

mientras cae
cada pequeña muerte en granazón,
y todas se reúnen,
y la arena se agranda
hasta cubrir toda la habitación
con un murmullo seco de sombras alejándose.

En este sueño, padre,
puedo verte jugando con mis manos.
Cuando las manos eran cálidas y obradoras.

Lápices de ternura,
que nos llevaban siempre a emborronar los sueños.

De "El jardín navegable" 1990

jueves, 12 de junio de 2014

CARTA A UN POETA NUEVO



Oh apasionado adolescente, cuida
que tus palabras no lo digan todo,
y sirvan ellas de iluminación
porque les diste persistencia de astro,
no por quemarlas y quemarte en ellas.
Equipaje, 2005

miércoles, 11 de junio de 2014

Memoria poética



Parece como si existiera en el cerebro una región totalmente específica, que podría denominarse "memoria poética" y que registrara aquello que nos ha conmovido, encantado, que ha hecho hermosa nuestra vida.

Milan Kundera

martes, 10 de junio de 2014

ANÁLISIS DEL VIENTRE









ANÁLISIS DEL VIENTRE

Aquel vientre era para ser observado con lupa,
pues bajo el cristal cada pequeño pliegue,
cada rugosidad se hacía
multiplicado labio.
El amor, demasiado brutal,
jamás repararía,
el petulante de la viril pasión
que el aire agota de un solo trago inútil
jamás repararía.
Mas nosotros, mi amiga, analicemos
con la frialdad habitual a la que sólo
el poema se presta
la difícil pasión de lo menos visible.

lunes, 9 de junio de 2014

Demoradamente







Me voy a demorar aquí hacia los fugaces días;
contra tanto saqueo voy a ofrecer resistencia,
elevar un rumor de abejas que confundan;
bien quisiera un agosto desmedido,
el saber de los abrazos que repiten en el encuentro,
en las esquinas del tiempo.

Y voy a estar en las prórrogas del calendario grande.

¿A donde lleva el olvido los distintivos del corazón,
las grandes causas?
¿Qué espejo entierra tanto?
¿Qué censo no deja constancia de los que sobrevivieron?
¿Quien ha borrado los pronombres?

¿Con qué desolación visita el tiempo
y repara en la honra, en los recados de los sábados,
en las rosas de puntual aparición, en las tizas
de fijar el pájaro en las pizarras,
en la brasa que encontramos en el 
centro de la ciudad;
aquel amor confuso parecido a la tristeza;
miradas de ojos bajos...?

¿Qué cruzadas tormentas golpean estos muros?
Voy a quedarme a repasarlo todo,
a ser la luz vigía, a mirarlo otra vez,
a repetir los nombres, a decirlos despacio,
a sacarlos del error de su muerte,
a respirar con ellos,
a alentar una flor por encima de la estación festiva
y tan mortal un marzo de alta lámpara.

Voy a vivir en esta casa mientras perdure
el pan de tu memoria. 

domingo, 8 de junio de 2014

Amor

                           


                       Ven, Amor, si eres Dios, y vuela. 
                                                  Luis de Góngora


O no suspires por su nombre 
o no reclames su presencia; 
que si llega a escucharte, te abrasa; 
que si llega a abrazarte, te quema. 
No es un dios el Amor, pero vibra; 
no es abeja el Amor, pero vuela: 
vibra, músico, en todos los cuerpos; 
tiembla, candido, en todas las nieblas. 
Y si pone en los labios rocío, 
una gota de sangre se lleva. 
Que le gustan los labios si rojos 
y por blanca la blanca azucena, 
y vuela. 


                               (De Servidumbre de paso, 1981)

sábado, 7 de junio de 2014

Planas de poesía






"porque además de ser un hombre como vosotros, soy un poeta, y un poeta es un corazón más sobre la niebla del mundo.
Por favor, abridme paso, que quiero ser el primero en saludar con mi sangre vuestras sonrisas de azufre, vuestras mujeres de estopa. Por favor, abridme paso."

viernes, 6 de junio de 2014

Los 300 escalones






Papá, perdimos tantas cosas 
además de la infancia y los trescientos escalones que tú pintaste 
nunca he sabido si para decirnos que había que subirlos o bajarlos. 
Y ahora pienso, desde tu mano que me ayudaba a recorrerlos, 
que tal vez me dijiste entonces 
que había que subirlos y bajarlos 
y para eso los pintaste 
y para eso pasaste días enteros 
pintando una escalera interminable, 
una hermosa escalera rodeada de árboles y árboles 
llena de luz y amor, 
una escalera para mí, 
una escalera para que pudiera subir, 
vivir, 
y una escalera para descender, 
callar, 
y sentarme a tu lado como entonces

jueves, 5 de junio de 2014

Mujer de primavera




Mujer de primavera

Detrás de las palabras sólo te tengo a ti.
Triste quien no ha perdido
por amor una casa.
Triste el que muere
con un aura de respeto y prestigio.
Me importa lo que sucede en la noche
estrellada de un verso.

miércoles, 4 de junio de 2014

Todos tienen algún objeto precioso que ofrecer...




Todos tienen algún objeto precioso que ofrecer:
un cuenco de agua negra en que mirarse,
la piel recién curtida de un leopardo,
un hijo o un potro amado por los vientos.
Pero yo nada tengo:
cuando quiero mostrar tu reflejo en mis manos
te pierdo, y otra noche infinita
comienza, pues al perderte ni siquiera yo
me pertenezco.



(de "Hainuwele", 1990

martes, 3 de junio de 2014

Nadaba...





Nadaba por el agua transparente 
en lo hondo, y pescaba gozoso 
con un pequeño arpón peces brillantes, 
amigos, moteados. 
Aquella agua tan densa, nadar 
como un gran pez, vosotros, 
dijo, me esperabais en casa. 
Pensé entonces en Klee, 
en la dorada. Ahora leo: 
estás roto y tus sueños 
se cuelan en tu vida, esa sensación 
de realidad es muy fuerte; estas pastillas 
te ayudarán. 
Dorado pez, 
dorada de los abismos, destellos 
en lo hondo. Un sueño subterráneo 
nos recorre, nos reúne, 
nacemos y morimos, mas se repite 
el sueño y queda el pez, 
su densidad, la transparencia. 


(Antonio Gamoneda, Jerónimo Salvador) 
(De caza nocturna) 

lunes, 2 de junio de 2014

El poema no escrito






EL POEMA NO ESCRITO

Me gusta contemplarte al salir de la ducha,
como a Susana los ancianos bíblicos.
Por la puerta entornada te acecho cuando envuelves
en la toalla el muslo o el tobillo,
el pecho rebosante tras la línea del brazo:
odaliscas de Ingres, pastoras de Boucher
cálidas, sosegadas, inocentes,
ninfas de Bouguereau, esclavas de Gérôme,
Venus de Cabanel –horizontal espuma–,
tan redonduelamente comestibles.
Tendrá un nombre ese pliegue de la axila
que se bifurca en dos entre los dientes;
el leve mofletillo que bordea redondo
el friso de la media, debajo de la nalga;
ese cuenco rosado en que acaban las ingles,
donde el pulgar se tensa en breves círculos
entreabriendo el estuche de la lengua.
Tengo que consultar a un catedrático
de Anatomía.
                      Ya escribiré un poema
cuando esté muerta el arte del deseo

domingo, 1 de junio de 2014

SIEMPRE LLEGAMOS A DESTIEMPO





                           

                        Siempre llegamos a destiempo.
                        Cada llegada es un fracaso. Parte
                        ya el tren y conseguimos
                        subir en marcha. Todo en vano.
                        Nos lleva, es cierto. Pero ya se ha ido.
                        A través del cristal nos asomamos,
                        pero la vida ya se ha ido; todo
                        se ha ido inacabado.

                        Estamos viendo, rostros, árboles,
                        de otras personas y otros campos.
                        Estamos contemplando una montaña
                        que ya no es esta misma que miramos.
                        Oímos voces, gritos, carcajadas
                        que hace ya tiempo que sonaron.

                        Difícilmente pretendemos
                        hallar una respuesta por el tacto;
                        y cuando al fin tocamos algo vivo
                        ya no está allí lo que tocamos.
                        Cada momento que nos lleva
                        es un presente ya pasado.
                        Nos lleva, es cierto. Pero ya se ha ido;
                        se había ido al alcanzarlo.

sábado, 31 de mayo de 2014

Encontrar soledad para entenderse






MUNDO completo: Mirada entendida.
La obra mayor consiste en dejar claro
el espacio intermedio:
dejar posible el beso.

Si no asumiera su función letal
la memoria intermedia, tendería
a quedarse en su forma, no a escaparse
para repostar cielo en otros cuerpos
y conservar más tiempo la fe que le da el vuelo.

Pero necesitamos encontramos
el mundo y yo. y en ese cuerpo anclado
que repite y devuelve las señales
se nos cede un poder de soledad
inconcebible aisladamente,
una seguridad que nunca espejo alguno
pudo tener ni dar porque, pasivo,
carente de nostalgia y de memoria
cedía al espectáculo mortal.

El mundo y yo, ya iguales y recíprocos.
Varado en ese islote corporal
en que la eternidad se transparenta,
recibo las señales del universo pleno
en mi propia mirada comprendida.

viernes, 30 de mayo de 2014

Letanía del ciego







Soy como un ciego 

Y tú que tanto amas, tanto ríes, 
tanto adivinas y conoces tanto, 
¿dónde el escudo para que te fíes, 
dónde el pañuelo de enjugar tu llanto? 

¿Dónde el camino que no veo ahora? 
Dímelo o llora y el mirar suprime. 
¿Es ya la noche que no tiene aurora? 
Dímelo, dime. 

Y sin embargo tu vivir empaña 
mi vivir con un vaho que es ternura, 
que es caliente rumor que me acompaña 
la noche oscura. 

Y sin embargo con tu mano guías 
y a tientas toco lo que apenas veo 
y digo acaso para que sonrías 
lo que no creo. 

Y toco apenas y tu bulto aprendo 
y torpe sigo lo que tú me indicas. 
Lo que no miro, lo que no comprendo, 
tú multiplicas. 

Tú multiplicas, o quizás es tu invento 
porque lo vea aunque quizá no exista. 
Entre la noche de mi pensamiento 
dulce es tu vista. 

Dulce es tu vista, tu mirar risueño
que mira un llano donde estaba un monte
y que a mi alma de temblor pequeño
llamó horizonte.

Dulce es tu vista que miró aquel lago
y lo llamaba alegre mar bravío.
Tu generoso corazón es mago.
¡Lo fuese el mío!

jueves, 29 de mayo de 2014

Estamos siempre solos





Estamos siempre solos
bajo estas guerras suspendidas por el norte y el este,
por el sur y el cautiverio,
por el oeste de afiladas montañas
y a Ti llegamos, como
esos ciervos perdidos en un bosque inconcreto
sin poder gritar, porque las lianas
se enredan a la voz del que pide el camino.

miércoles, 28 de mayo de 2014

Abolidas las naves, el mar solo






Abolidas las naves, el mar solo 
es quien nos cerca entre las viñas ásperas. 
Muros de agua profunda reconstruyen, 
frente al olvido, esta prisión sonora, 
y en la ilusoria plenitud humana, 
marginal como un príncipe bastardo, 
recorre la aridez, cruza el paisaje 
este muchacho casi reducido 
a la animalidad.